DEMOCRACIA
EN AMÉRICA
Paso decisivo que USA dio en 1776, y Tocqueville describió a la perfección
Madrid,
1 agosto 2018
Pensador e historiador francés, Alexis de Tocqueville (Ille de France
1805-Cannes 1859) fue uno de los ideólogos del liberalismo[1],
y el principal cronista del desarrollo democrático en los EE.UU.
De
ferviente familia
católica, en su casa tenían como gran amigo a un sacerdote
misionero en Boston, de la Congregación de San Sulpicio, que le explicó el
rechazo que la Iglesia había hecho del modernismo a nivel ideológico, al
basarse en una concepción errónea del hombre.
En París estudió derecho y trabajó
como funcionario del estado francés, como magistrado y diputado del Partido monárquico,
y siempre desde una visión anti-revolucionaria.
Casado
con una puritana inglesa, marchó a Estados
Unidos en 1831 en viaje diplomático, con el fin de analizar su
sistema penitenciario. Allí decidió escribir su Democracia
en América-1840, en colaboración con Beaumont.
Tocqueville fue el prototipo de escritor
de 2 velocidades[2],
de ver las cosas y sus contrarios, lo bueno y malo de ambas.
Fue el precedente
de la filosofía política[3],
gracias a su innovadora aplicación científica al mundo de la democracia, para
restaurarla y alejarla de la tiranía. Y eso que él nunca se consideró filósofo,
y trató siempre de no filosofar. Pero fue insuperable su descripción de la
realidad, presente en los nuevos hechos, y su reflexionar sobre cómo conjugar
libertad e igualdad.
Desarrolló su concepto de ciencia
democrática del ministro francés Guizot e historiador Bizeau[4],
preocupándose por el peligro de un poder tutelar por parte del estado, “desde
la cuna en que uno nace hasta la custodia de sus cenizas en la tumba”. Era el
caso de “los políticos convertidos en tutores, más que en tiranos”,
concluía Tocqueville.
Su metodología se basaba en la
contraposición libertad-igualdad, democracia-autocracia… no a nivel de cosas
contrapuestas pero sí diferentes.
Al llegar a EE.UU, no se conmovió al ver la nueva democracia
norteamericana[5],
al darse cuenta de que su fruto era resultado de su carácter novedoso, y no de
la voluntad humana. Eso sí, valoró sobremanera su respeto a la ley por propia
voluntad humana, y su deseo del ethos-costumbres
de auto-gobierno[6].
En su Memoria de la Pobreza-1835 dio con el origen de la
desigualdad entre los hombres: los procesos de civilización[7].
Así, pues, concluía Tocqueville, “sólo en un estado salvaje o en un altísimo grado de civilización
llegarán a ser los hombres iguales”. En su Democracia en América-1840 analizó lo que estaba pasando en la nueva democracia norteamericana, y lo contrastó con lo que había ido pasando en la vieja democracia europea.
Con
la llegada de la Restauración de Viena, tuvieron lugar 2 revoluciones
europeas: la de 1815 y la de 1848. Tras la de 1815 los estados fueron
asumiendo, poco a poco, todas las instituciones humanas. La de 1848 tuvo de
trasfondo el romanticismo político, con deseos de que éste llegara a la masa
popular, y un concepto muy sentimental de la política. Eso sí, proponiendo
siempre las problemáticas, pero sin compromiso por solventarlas.
Se trató de una época, según Tocqueville, en la que “la escuela
histórica alemana empezaba a dar culto a la ciencia, al progreso y al
pueblo. Todo ello con un ideal esteticista, buscando un yo romántico dionisíaco,
un yo nacional por encima del Dios universal, un yo sentimental por encima del
raciocinio”[8].
Y, junto al sentimiento irracional, empezaba a surgir el nihilismo de Nietzsche[9]
y existencialismo de Sartre[10],
colofón condenatorio en que acabarían los movimientos europeos.
Se trataba de una “tristeza generalizada europea”, según Tocqueville, y “no sólo por los crueles efectos
de las revoluciones industrial y social, o por las guerras y post-guerras
consiguientes, sino por las propias ideas salidas a la calle”. Tristeza
generalizada que trató de ser reconducida por los intelectuales mediante el contractualismo
político, intentando re-estructurar la sociedad desde la nada, ex-nihilo[11].
Representaba el ideal del romanticismo
político, aunque inclinado mucho más hacia el liberalismo[12]
que hacia el nacionalismo[13]
y socialismo[14].
No obstante, tenía el peligro de convertirse, según Tocqueville, en uno de los 3 tipos de democracia europea: -tiránica,
si la libertad norteamericana lograra dominar despóticamente,
Si la igualdad se volviera obsesiva en
EE.UU, según Tocqueville: -“todo
el mundo querrá ser igual”[15],
Si la libertad se volviera obsesiva en
EE.UU, según Tocqueville: -“el
ciudadano querrá resolver los problemas sólo a nivel práctico[17],
y nunca teórico[18]”,
El problema de la democracia
norteamericana podría venir, según Tocqueville, en que todo el mundo quisiera recibir cada vez
más, y sólo el bienestar material fuera lo que moviera al ciudadano. De ahí que él
plantee: -“un
elemento diferente y neutral[21],
para equilibrar la política”, b) Democracia en América de Tocqueville
Tuvo su 1ª causa de éxito en el sentimiento
norteamericano[22],
dirigido por la religión[23]
en las mores-hábitos: -del
corazón, cuya costumbre libertad era fundamental,
Y su 2ª causa de éxito en la igualdad
de condiciones, ya presente en los ilustrados europeos[24]
y aquí en los EE.UU: -intocable,
y elevada a categoría de religión[25]
providencial[26],
Y estas dos cosas funcionaron en EE.UU, según Tocqueville, pues “aquí coincide la moral
cristiana en todos sus rincones, y ésta ha sido puesta por los norteamericanos
como el pilar de su democracia”[29].
Comienza describiendo el aspecto
exterior de EE.UU, dividida en 2 vastas regiones[30],
el valle del Mississipi[31],
costa atlántica, bosques del norte, praderas del interior… Junto a un
recorrido por sus tribus primigenias y huellas de pueblos desconocidos.
Introduce a continuación el proceso
de independencia llevado a cabo en los EE.UU, desde su fundacional
deseo de ser un gran pueblo[32]
hasta la colonización de nuevos estados y primeras leyes y códigos civiles
desarrollados en ella[33].
Destaca el francés su fervor religioso, espíritu republicano y deseo de
libertad.
En cuanto al estado social de los EE.UU,
resalta Tocqueville el deseo norteamericano de levantar un estado democrático,
a nivel material y espiritual, y modificando todo lo necesario en pro de su
consecución.
El principio de soberanía en los
EE.UU es popular, surgió de los municipios[34]
y se instaló en el gobierno estatal[35]
a pesar de las diferencias regionales[36].
Así, es intocable e independiente de la mayor o menor participación del censo
electoral.
En cuanto al poder judicial, se trata de un
poder no independiente sino sometido al control político, y que otorga a los
jueces la potestad para declarar inconstitucionales las leyes. Parte del derecho
tradicional y no canonístico, e incluye la cláusula que permite a los
ciudadanos acusar a los funcionarios del gobernador.
En cuanto a la Constitución de los EE.UU, el
poder constitucional: -“descansa
completamente en el gobierno de la Unión, a modo de derecho común de todos los
norteamericanos”,
En la política de la Unión, el poder
legislativo se divide en 2 ramas: -el
Senado, que garantiza el principio de independencia de los estados federales[37],
Hasta que es el presidente de los EE.UU el que
asume la soberanía popular, intentando pactar con el resto de instituciones políticas[39]
y federales las propuestas votadas electoralmente por los ciudadanos.
En cuanto a las ventajas del sistema
federal, enumera Tocqueville: -“salvaguardar
la libertad y actividad de los pequeños estados”,
En cuanto a los partidos políticos, éstos
integran miembros con todo tipo de puntos de vista[40],
pero han de tener en común[41]: -los
momentos de crisis, donde es el momento de los grandes partidos y grandes
principios,
La libertad de prensa en los EE.UU es uno de sus
pilares más importantes, e incluso capaz de modificar leyes y hábitos. Pues,
según Tocqueville, “en
una EE.UU sin
patentes y sin focos de influencia[42],
cada periódico carece del más mínimo poder, aún sin perder su capacidad de poner al
descubierto la política, en nombre de la ciudadanía”.
La asociación ciudadana es otra de
las grandes cualidades de los EE.UU, como conjunción de voluntades
individuales. Y es que, apunta Tocqueville, “el ciudadano norteamericano aprende
desde su nacimiento y crianza[43]
que es preciso apoyarse en sí mismo para combatir las dificultades, a nivel
vecinal, comercial, placentero, religioso”.
En cuanto a los funcionarios públicos, éstos
reciben salarios y beneficios por debajo de la media nacional, e incluso están
mal mirados por vivir del mérito de otros y no suyo. Eso sí,
“dan una marcha
natural al gobierno de la democracia, al llenar de simpleza la burocracia
administrativa”.
Por último, acaba profetizando Tocqueville el enorme
porvenir de los EE.UU, “por su raza y extensas pretensiones, por sus
inmensos dominios por explotar en la zona de México, por su interna diversidad
fisonómica que les hace producir todo tipo de retoño, por su novedad e inserción
en civilizaciones antiguas y perdidas”. b.2)
Democracia en América, 2ª parte
Gira en torno a los peligros
de la democracia, como son: -la
centralización política, tendente a regular la vida de las personas[44],
En cuanto a la libertad e igualdad, los pueblos se inclinan por la
igualdad[46].
Una igualdad
de condiciones, y no tanto igualitarismo de oportunidades, que abra la puerta y
posibilite la libertad. Y una libertad
que anime a los ciudadanos a participar en el gobierno de los pueblos, pues “sólo
se hace bien lo que es conforme a los deseos”. De hecho: -“la
igualdad pertenece al proceso racional”[47],
En cuanto al individualismo,
no se trata de la defensa del individuo por encima de la sociedad[48],
ni de un error de la voluntad. Se trata de un error del conocimiento, de un
sentimiento de intimidad que tiende a: -“formar
una pequeña mini-sociedad a mi alrededor”,
Lo cual debe ser reconducido, anuncia Tocqueville, mediante una educación
cívica. Pues “este individualismo puede degenerar en el gozar y en pensar sólo
en gozar, pervirtiendo los valores democráticos y degenerando en el despotismo”.
En cuanto a la teoría del interés
bien entendido, la más adecuada según Tocqueville para la política,
ésta se lleva a cabo a través de: -las
asociaciones, que tratan asuntos comunes[49],
Pues, a fin de cuentas,
“el estado es el remediador de las debilidades
sociales, y de cosas que no puede alcanzar por sí mismo el individuo”.
Finalmente, Tocqueville acaba reconociendo que “ama la libertad,
igualdad y derechos, pero no la democracia”, pues “debe ser la aristocracia y no la plebe lo que la haga funcionar”. Una
aristocracia que para Tocqueville: -“no
se basa en la posición social de los ricos”[50], Se trata de un principio aristocrático que venía a decir que la aristocracia era la institución natural de los mejores, cuyo espíritu no podía ser eliminado, y siempre renacería de sus cenizas. Proveniente de la aristocracia griega, se trataba de una aristocracia que dependía desde sus inicios de la paideia educativa sobre la armonía del alma[51]. Y de una aristocracia que criticaba solapadamente al régimen mixto de gobierno[52]. Madrid,
1 agosto 2018 ________ [1] A su manera, pues nunca tomó partido en nada. [2]
Pues
el s. XIX tuvo 3 tipos de escritores: -de
1 velocidad, que escribían su visión monográfica y lineal de las cosas,
y sólo esas cosas eran buenas, [3]
Según le definió STUART MILL. Y es que, según DIEZ DEL
CORRAL, ha habido 3 tipos de científicos de la política: -los
publicistas, que hablan de las leyes, derechos y elementos primarios de
la política, como PLATON, ARISTOTELES, MONTESQUIEU, ROUSSEAU… [4] Que explicaba la historia de la civilización desde la dualidad y lucha rey-Iglesia, aristocracia-pueblo... [5]
Según PIERSON, gran biógrafo de TOCQUEVILLE. [6]
Alma de la democracia norteamericana, debida sobre todo a su fuerte
religiosidad. [7] Pues entre medias de los procesos sólo existen diversos grados de desigualdad. [8] Según explicó el sensualista y teosófico francés BIRAN con su “siento, luego existo”, cambiando el cartesiano “pienso, luego existo”. [9]
Que afirma que “la tristeza está en la base del pensamiento”,
respondiendo así a la libertad de capricho de HEGEL.
Nihilismo que tiene su origen en el teólogo católico
BAADER, primero en hablar de un “nihilismo científico”.
Pues la razón por sí sola no podía llegar hasta la verdad, y de ahí que
debiera ser superada. De ahí que NIETZSCHE llegara a afirmar que “nada es verdad, y todo está permitido”. O que “nada es verdad, y por eso hay que tener voluntad para crear el mundo desde la nada”. Es el movimiento del nihilo (de nihil, nada), que trató de emular la creación de Dios del mundo de la nada (ex-nihilo), y trató de crear un nuevo mundo sin Dios, de la nada. [10]
Que afirma que el hombre es “un ser condenado a ser libre”. [11] Según las instrucciones que ya HOBBES había dado en su Leviatán-1651. [12] Nacido en Inglaterra desde su Revolución gloriosa-1688, en que se derrocó a JACOBO II DE INGLATERRA y aupó al liberal GUILLERMO III DE INGLATERRA, de la familia ORANGE. Fue el momento en que LOCKE impulsó la libertad y un parlamento bicameral, así como nació una vida burguesa bajo la máxima del “trabajo como base para la propiedad privada”. [13] Consecuencia reaccionaria contra la Revolución francesa-1789, que hablaba de una soberanía nacional y su consiguiente estado nacional. Extendido por todos los países europeos en oposición a Francia, se alió casi siempre el nacionalismo con el tradicionalismo. [14] Surgido del Manifiesto Comunista-1848 de MARX, desde el intelectualismo sobre la igualdad social. Pues todo el movimiento industrial había reforzado las posturas de la burguesía, y no tanto del proletariado. [15] Pero no a nivel de esfuerzos y resultados. [16] Como símbolo por excelencia de la igualdad. Lo que supone el punto débil de la democracia, pues la gente se refugia perezosamente en esa capacidad, y sólo mediante él reclama el bienestar. [17] Cambiando túneles, señales de tráfico… [18] Lo que acabaría provocando una tiranía de la mayoría (sin origen determinado, pues no hay voluntad de destapar al tirano). Es lo que ocurre hoy día, que estamos muy democratizados porque somos libres… para votar al siguiente déspota. [19]
Sino que son las que están de moda. Pues la
democracia habrá ido
haciéndose inamovible. [20]
Sobrando la familia y resto de asociaciones comunitarias. [21] Como el aristocrático, por ejemplo. [22]
Un
sentimiento-pasión, o sentimiento nacional, que marca la vida de los
norteamericanos, tanto de los ricos como de los pobres. Y eso es bueno, pues
elimina la apatía, y pone por debajo de él
las leyes y resto de elementos políticos. Un sentimiento norteamericano
que, según TOCQUEVILLE: -tenía
que revivir constantemente sus hechos fundacionales, para mantenerlo vivo, [23]
Pero no una religión como plantea su colega REBECQUE, que
reduce la religión a mero sentimiento y conciencia personal e íntima sobre
Dios, sin necesidad de estructuras externas (como la Iglesia) ni nada que
decir a nivel exterior (ni siquiera sobre su tradición). [24] Tales como DESCARTES (que había propuesto principios claros y distintos) y MONTESQUIEU (que hablaba del honor y temor de los ciudadanos). [25]
Lo que al propio TOCQUEVILLE le produce cierto “terror religioso”
(a forma de fatalismo, pues esto en Europa había sido impensable tanto en
el pasado como en el presente). [26] Porque está en manos de la providencia, en lo que el Cristianismo ha ido sembrando en el mundo (el ser todos hermanos, el ser todos hijos de un mismo Padre…) y en lo que la Iglesia ha ido viviendo siempre (en democracia interna desde siempre). De ahí que sólo la justicia de Dios pueda procurar en las viejas democracias de Europa algo similar, pues para sus ciudadanos es ya algo imposible. [27]
Que acaban declinando su favoritismo, antes o después, hacia un lado u
otro. [28] Pues en EE.UU es todo un símbolo de universalidad, durabilidad, providencialidad… [29]
Cosa que no ocurre en Europa, según TOCQUEVILLE. Pues aunque tan sólo es
una minoría la contraria a la religión cristiana, no para de gritar en las
calles la anti-clericalidad, logrando que la mayoría lo haya aceptado sin
decir nada (temiendo más el quedarse solos que el error). [30]
Una que desciende hacia el polo norte, y otra que vierte hacia el ecuador. [31]
Con huellas de cataclismos que ocurrieron en él. [32]
Punto de partida de los Estados Unidos. [33] Inspirados en la Torah judaica, según TOCQUEVILLE. [34] Unos municipios “donde siempre había sido difícil conservar la libertad” “existen elementos toscos” “sufre intromisiones semibárbaras en el poder”, advierte TOCQUEVILLE, pero que “consistía en la primera molécula social”, pues “en ellos estaba todo el germen y espíritu de la ley norteamericana”. [35] Gobierno de cada estado que está representado por su gobernador, encargado de elegir a los jueces de paz, policías y funcionarios. [36]
Como se ve en los diferentes modelos administrativos, cuya
participación política: -es
menos activa y completa según se desciende hacia el Sur, [37] Como órgano elegido por los legisladores provinciales. Organo encargado únicamente de legislar. [38] Como órgano elegido directamente por los ciudadanos, de un solo golpe electoral. Organo con potestad judicial, como para bloquear e incluso denunciar las leyes propuestas por la Cámara de Representantes. [39] Sobre todo con el Senado, del que necesita el apoyo de 2/3 para poder llevar a cabo cualquier tratado o proyecto de ley. [40]
Ya sea en: -el
Partido republicano, mayoritario y amante exclusivo de la libertad, [41]
Incluidos los ricos, que hablan dulzuras del gobierno pero luego se enajenan
del interés nacional, rechazando participar en política para no poner en
juego su riqueza en una lejana lucha política. [42]
Pues la difusión periodística queda prácticamente difuminada a lo largo
del vasto territorio norteamericano. [43] Como se ve en la escuela, donde los niños someten sus juegos a reglas que ellos mismos han establecido. [44]
Tutelándolos como animales pastosos, y eliminando los poderes
intermedios. [45]
A forma de plegarse uno a lo que diga la mayoría. Pues eso eliminaría el
tener que pensar, y no poder elegir y vivir vocacionalmente las mores-costumbres.
Y es que la democracia en EE.UU tiene dos caras, para TOCQUEVILLE: -una
positiva, cuando los ciudadanos ceden de lo suyo en pro del bien común, De ahí que si no se equilibran los elementos democráticos, pueda producirse: -la
tiranía de la opinión, que impone una minoría a gritos, ante la renuncia
que hace la mayoría de sus principios, [46]
Aunque ambas debe ser buscadas al mismo tiempo, sin contraponerlas ni ver en
ellas 2 etapas sucesivas. Pues: -la
libertad puede liberar del veneno de la igualdad, y viceversa, [47]
Aunque los hombres la busquen equivocadamente en la pasión, sentimientos e
ideas: -al
exigir la ausencia de diferencias, por ser esto discriminatorio (concediendo
a lo máximo una legítima diversidad), Así, las normas ya no son dictadas por el derecho sino por un grupo de la plebe, bajo el eslogan de “hay más sabiduría en un grupo de personas que en una persona sola” (para que nadie piense ni dicte doctrina). [48] Que ya estaba presente en la democracia antigua, en la idea de persona cristiana y en el liberalismo del mundo protestante (en el que cada uno debía ir a lo suyo, pues cada uno tenía su predestinación y no tenía por qué preocuparse de la salvación de los demás). [49]
Y únicas “capacitadas de poder para eliminar el poder”. [50]
A los que tacha de desunidos, y carentes de propuesta política. [51] Que educaba a estar bien formado antes de ser buen político. [52] Entre monarquía-aristocracia, democracia popular-aristocracia… Como era el caso de Inglaterra, donde incluso se seguía manteniendo la confesionalidad religiosa oficial. |