BAJA EUROPA MEDIEVAL
Creciendo a la sombra del s. X al XII como semilla del imponente y futuro s. XIII
Madrid,
1 febrero 2019
La disolución del Imperio carolingio del año 888 había venido seguida por una II oleada de invasiones bárbaras
(888-1028, tras la I Oleada del 406), con el resultado de multitud de principados y ducados
independientes.
En efecto, las invasiones
vikingas, el pueblo
de los magiares y la presión musulmana sobre el Mediterráneo, fueron las
constantes que movieron estos 150 años, todas ellas piráticas y sin conquista
de territorios. Cabe destacar: -las
invasiones vikingas, en sus 3 ramas[1],
No obstante, todas estas oleadas bárbaras trajeron como elementos
positivos: -la
incorporación de nuevas tierras y habitantes a Europa,
El siglo X supuso la total
desaparición del mundo carolingio, y un siglo desconocido casi al completo[7],
salvo por sus escasas y negativas noticias. No obstante, fue un siglo de puente,
que integró las oleadas normandas y permitió sanear las estructuras europeas.
El siglo XI supuso el comienzo del
crecimiento y florecimiento por todas partes, tras el año 1000. Pues, en un par
de generaciones, Europa y su cultura vinieron a dar un giro insospechado, con
demografías desbordadas e incorporación de nuevos territorios. Fueron síntomas
de este giro europeo: -la
reconquista de España,
Si
el
s. VI había sido el siglo del hundimiento demográfico, que había despertado levemente
en el mundo carolingio y fue detenido momentáneamente durante las II invasiones
bárbaras... el s. X vino a ser casi inamovible, aunque con tendencia
imperceptible hacia el alza.
Tras el s. X, y por causas de difícil
comprensión, el s. XI vivió el momento en que Europa triplicó su población in-intermitentemente,
haciendo crecer todos los sectores[11],
desde la producción agraria hasta la rotulación de nuevas tierras. Destacaron
los crecimientos de: -Italia,
que pasó de 5 a 10 millones,
Se trató de un crecimiento sin pausa por más de
200 años, haciéndolo
más por razones
espirituales que por razones objetivas[12],
y obligando a producir mucho más de lo que se hacía[13].
La esperanza media de vida se situó en los 35 años[14],
y la mortalidad se concentró en el primer año de vida.
Así, pues, Europa pasó a tener crecimientos[15]: -de
42, 48 y 69 millones (ca. 1000, 1100, 1200),
Por zonas geográficas, el
crecimiento demográfico fue capital para ceder el liderazgo europeo a unas
regiones y no a otras. Fueron las zonas con mayor densidad: -Ile
de France, con 120 hab/km2, Sucedieron de forma lenta y sin ninguna revolución espontánea. Fueron la suma de muchos pequeños avances, sin protagonismos pero con acumulación de modelos de un sitio a otro. Tuvieron que ver con el aprovechamiento de la energía, tanto animal como humana.
Y basaron sus avances en el perfeccionamiento
de: -los
utillajes de herramientas[17],
No obstante, el invento de la ballesta
a mediados del s. XI resultó letal, y su utilización fue prohibida por los concilios eclesiales, al
considerarse un arma desproporcionada.
Basó
sus avances en la lenta generalización
de[20]: -la
herradura[21],
Fueron, además, nuevos inventos
del s. XI-XII: -el
estribo, con monta segura para el caballo,
El caballo, pues, fue preparado: -para
el campo de batalla más avanzado[23],
Basó sus avances en la generalización de los molinos
de agua[25],
que ponían engranajes a las corrientes de agua y movían así enormes
piedras-ruedas, utilizando su fuerza para diversas tareas.
Esto conseguía: -moler
grano[26]
a las mujeres[27]
para la harina doméstica[28],
En
cada pueblo hubo 1 ó 2 molinos, pertenecientes a las gentes señoriales y a su
monopolio[31].
Fueron el resultado de la fusión de 2 elementos[32]: -las
nuevas técnicas,
En cuanto a nuevas técnicas, la invención del arado
de vertedera[33]
fue esencial para voltear la tierra y airearla. Además, se compaginó muy bien
con el arado de ruedas, necesitando para ello[34]: -una
fuerza de tracción mayor, como 4-8 bueyes o incluso caballos,
También se utilizó el barbecho[35]
para dar mayor fertilidad a la tierra[36],
con rotación bienal[37],
trienal[38]
o cuatrienal[39].
Otros cultivos también enriquecieron
la producción: -la
viña, de gran rentabilidad[40],
para consumo de vino en la ciudad,
En cuanto a la ganadería, ésta ofreció: -carnes,
para abastecimiento de las ciudades,
En conjunto, millones de hectáreas fueron
puestas en explotación, destacando las zonas: -del
centro-norte, que adquirió la primacía agraria y demográfica sobre el
resto,
Hacia el s. XIII Europa estaba inmersa en la
utilización y cultivo de millones de hectáreas de bosque y matorral, fenómeno
conocido como el de las “grandes roturaciones”.
Este proceso de explotación del suelo europeo, existente todavía hoy en
día[46],
pasó por 3 fases: -hacia
el año 1000, donde cada campesino arrancaba terreno a los bosques, y ganaba
terreno a las cañadas públicas;
En cuanto a las formas de dominio del suelo, sobresalieron 3 modelos: -Inglaterra
y el noroeste, con llanos y campo abierto, fincas de 200-1000 m. largo x
15-20 m. ancho, cereal y tierras para grandes arados, roturación trienal, arado
de rueda y vertedera; -Gales,
Escocia e Irlanda, con predominio del paisaje céltico, poblamiento en pequeñas
aldeas rodeadas de tierras, zonas alejadas para la ganadería, parcelas
irregulares; -el
Mediterráneo, con gran variedad de suelos, huertas, sistemas de regadío,
cultivos de secano, viñedo y olivar como prototípicos, sin gran relación agrícola-ganadera[51].
Se trató de un modelo urbano muy distinto al experimentado en el Imperio
romano[52],
y es el que se mantiene en Europa hoy en día[53].
Viniendo de un urbanismo alto-medieval casi residual[54],
y de un urbanismo carolingio incipiente[55],
tras las invasiones normandas se puede hablar de 3 modelos de ciudad, hacia el año
1000: el nor-europeo, el mediterráneo, el eslavo. d.1)
Noroeste
Abarcó el valle del Rihn, Inglaterra, Flandes y Alemania, como modelo
heredero: -de
los wiks carolingios,
Agrupó a enteras colonias
mercantiles, que fueron invernando cada vez más establemente en
estos núcleos. Y empezó a darles privilegios, singulares por el tipo de
población mercantil instalada. Así, muchos artesanos, de origen campesino,
empezaron a buscar las ventajas fiscales y libertades del hombre libre[56].
Y tras agrupar y dar privilegios a los mercaderes, la ciudad
nor-europea
empezó a crecer gigantescamente, diferenciando 2 tipos de espacio
urbano: -la
civitas, o lugar de la antigua
estructura noble y eclesial[57],
Hacia 1100 este modelo ya estuvo del todo asentado[59],
siendo Brujas, Gante, Londres, Colonia, Estrasburgo y Basilea un fiel ejemplo de
ello.
Siguió la tradición romana, allí donde la
aristocracia no había abandonado del todo las ciudades romanas[60].
El sur de Italia, por su vínculo
con Bizancio, consiguió pronto el apogeo comercial, dirigido principalmente
hacia Sicilia y Egipto. Venecia, Amalfi, Bari, Nápoles, Pisa y Génova fueron
las primeras en emerger, ya desde el s. IX.
En el sur de Francia, sin contactos
bizantinos ni musulmanes, hubo un lento despegue urbano de la zona del Loira[61],
y de los dominios de los Capeto y Plantagenet[62].
En el norte de España, León, Nájera
y Barcelona[63]
fueron las ciudades más destacadas, con su matiz de frontera europea ante el
Islam.
Ya a inicios del s. X había empezado a desarrollar rasgos
cristianos civilizadores, estableciendo desde sus inicios monarquías
y ciudades reales fortificadas o gorod,
con sede episcopal y mercados fluidos.
Aunque su verdadero apogeo vino de la mano de los suecos-varegos[64],
que se dedicaron a la exploración de rutas comerciales, crearon el eje Báltico-Mar
Negro, y dinamitaron miles de espacios vírgenes.
Tras el 1100, los alemanes
fundaron el resto de núcleos urbanos eslavos, terminando de configurar estos
lugares[65]
por medio de colonos que llegaron aquí copiando sus modelos y fueros germanos.
Destacaron Cracovia y Poznan como sedes episcopales, y
Novgorod-Rusia y Ezstergom-Hungría como sedes reales.
Sin el desarrollo del campo, y su incorporación a la ciudad, ésta no
hubiera podido desarrollarse en el s. XI-XII lo que se desarrolló[66].
Por otro lado, en el s. XIII, el proceso fue inverso, y la ciudad empezó a
introducir sus ideas, modas y estilos de vida en el campo[67].
Luego la atracción fue mutua, como podía verse en el trasiego de personas del
campo a la ciudad, y viceversa.
La ciudad europea[68]
se surtió de los productos del campo[69],
de las materias primas naturales[70],
y de población campesina[71]
para configurar su urbanismo[72].
Así pues, el sistema feudal rural vino a transformarse en un sistema
feudal urbano, convirtiendo a la ciudad: -en
centro de distribución y comercialización,
La moneda, autentico símbolo de la
prosperidad de la ciudad, comenzó entonces a ser acuñada: -en
cada ciudad[74],
Tuvo 2 vertientes, la económica y la legal: -añadiendo
nuevos y mejores oficios que el entorno,
A nivel económico, la ciudad fue
un asentamiento de población que aglutinó relativamente más población que el
entorno, con división del trabajo. Cada país tuvo circunstancias distintas[78],
y cada ciudad sus propios procesos históricos[79].
Los gremios[80]
extendieron sus modelos por todos sitios[81],
y vinieron a ser el referente de calidad[82]
y bienestar[83]
de la nueva ciudad del consumo, con formación profesional[84]
incluida.
A nivel legal, los estatutos y
fueros configuraron el concepto de ciudad, ya viniesen antes o después de su
fundación[85].
Los fueros vinieron a sellar el modelo social pactado, y tuvieron en todos los
lugares las mismas constantes: -status
libre de población,
En cada zona hubo diversidad en la administración de servicios,
originando esto el fenómeno de familias
de fueros[86]: -desde
Westfalia a Holstein, y desde Holstein a Estonia,
Destacaron,
además, como muy particulares: -los
fueros de España,
Fue posible gracias a la apertura de 7 itinerarios
comerciales, 3 marítimos y 4 terrestres, que interconectaron Europa
a través del: -Mediterráneo
oriental, con los venecianos hacia Bizancio y Mar Negro, y los genoveses
hacia los países musulmanes;
Así como al asentamiento de 3 potentes
núcleos comerciales: -el
Báltico, en el norte de Alemania, que continuó la tradición de los
suecos-varegos, y que hacia 1160 fundaron HANSA[88]
con la idea de monopolizar los intercambios desde Francia hasta Rusia, a nivel
transportista intermediario; e.1) Mercados y ferias
El s. XII fue el siglo de la mayor revolución
industrial de la historia, fundamentado en un espectacular desarrollo
comercial. Número de mercaderes, mercancías, rutas de comercio… todo creció
por toda Europa, sin vuelta atrás.
Las
ciudades,
ya organizadas en el s. XI, fueron los grandes soportes del comercio, y
ofrecieron sus puertos[89],
centros urbanos, mercados y ferias para su ejecución[90].
Los
mercados,
ya existentes desde el s. IX, pasaron a convertirse en grandes centros semanales
o bi-semanales de comercialización al por-menor[91].
Tuvieron su propio momento[92]
y lugar acotado dentro de la ciudad, con defensa legal[93]
y militar[94]
ante los movimientos de masas y violencias interiores. Las ferias, anuales y con radio de acción internacional[95], reunieron grandes profesionales e intercambios al por-mayor. Dotadas de seguridad legal y militar, duraban 2-5 semanas, y hacían circular el dinero en grandes cantidades. Fueron, además, las que inventaron -las
letras de cambio, para no llevar sacos de monedas encima,
Destacaron las ferias de la Champania-Francia[96],
con 6 ferias anuales complementarias[97],
protección jurídica y policial, fundidora de las industrias textiles de
Flandes[98]
e Italia[99],
y potenciadora de sus sucursales Tournai, Lagny, Provins y Troyes. e.2)
Productos y transportes
Los
productos
más comercializados fueron: -los
de lujo, de protagonismo internacional[100],
Los medios de transporte, sobre todo
marítimos, fueron los que posibilitaron este movimiento comercial masivo,
mediante una serie de avances que afectaron a: -las
nuevas técnicas de navegación[102], En conjunto, este movimiento de productos del s. XI-XII posibilitó que no hubiera hambre en Europa, que los excedentes se movieran hacia zonas de sequía, y que las cosechas de unos climas completaran las de otras zonas climáticas.
Abarcó el 80-90%
de la población, incluyendo a señores y campesinos, y movido por: -el
aumento demográfico,
Resultado de todo ello fue la aparición de una cultura rural rica, de
clase media, de ritmos naturales de la vida, con creencias y transmisiones artísticas.
Tuvieron que ver con la concentración
de población en enclaves defensivos del s. X, sustitutos de los hábitats
dispersos anteriores[104].
Se trata de un mundo que dejó los oscuros bosques[105]
para concentrarse ahora en la vecindad[106],
a la sombra
de un castillo y monasterio, y con los cementerios como focos de atracción
poblacional[107].
Así, el castillo sirvió: -para
defenderse de las II invasiones bárbaras,
El encastillamiento fue, pues, un proceso que hizo la misma población,
liderada por algún noble[108],
y que trató de reagruparse para defenderse, desde el año 1000 en adelante.
La
parroquia
fue el elemento más vivo de las estructuras rurales y con más trascendencia,
configurando claramente a la población[109]
con ritos y ritmos propios de la vida[110].
Su creación fue posible a: -sus
circunscripciones geográficas, pues originaron una comunidad civil a su
alrededor[111],
El señorío fue el encargado de
agrupar a la población en torno a la fortaleza, tierras y bienes que se iban
levantando, y muchas veces en torno a su propia servidumbre. Poco a poco
vinieron a ejercer estos señores los poderes del rey[114],
uniendo en sí mismos lo público y lo privado, a nivel: -fiscal,
con la imposición de la talla-impuesto
directo[115]
y de las constitudines-impuestos
acostumbrados[116],
El municipio del s. XI[117]
fue forjándose en los límites del castillo y parroquia, con carácter rural y
obteniendo cartas de derechos comunitarios por parte de los señores feudales.
Estas cartas municipales, aprobadas
por el señor feudal, reconocían[118]: -el
reconocimiento de autoridades locales, más judiciales que políticas,
Fue producto de la abolición que se fue haciendo en los
ss. XI-XII[119]
de las cartas serviles que grababan a la población campesina y a su dignidad, y
que produjo la liberación
de taras.
Fue una liberación llevada a cabo en las cartas
municipales[120],
y no por los cargos de conciencia señoriales[121]
ni fruto de insistencias campesinas a nivel personal.
Así fue como vino a introducirse: -la
riqueza, comercio y competitividad entre unos pueblos y otros,
Todas estas mejoras vinieron a ampliar la adhesión
al sistema feudal global, y no al revés, pues: -no
hubo revueltas en los campos, ni señales de malestar,
La Edad Media fue anti-igualitaria. Abrió todos los campos de
libertades, derechos, ascensos…, pero mantuvo siempre claros los grupos
rectores que debían liderar el poder fáctico y legal[123].
Los señores feudales fueron los líderes del modelo social medieval, pudiendo
ser de 3 clases: nobles, eclesiásticos, señores de la tierra.
Entre el 840 y 930, tras la muerte de Luis el Piadoso y hasta el último
resto del Imperio carolingio, se produjo en Europa la plasmación plena del
feudalismo, nacido de la Francia occidental y extendido rápidamente
por toda Europa[124].
Se
trataba de un sistema que establecía vínculos personales que iban ligando
a unos aristócratas con otros, en torno a: -la
fidelidad, que se prometían unos a otros,
Fueron elementos de este vínculo
feudal[125]: -el
contrato vasallático[126],
El contrato consistía en una
ceremonia[128]
donde se hacía el juramento de fidelidad[129].
Tras lo cual se entregaba la carta escrita[130]
y el saquito de arena[131].
Así, pues, quedaba establecido: -el
poder del señor sobre el vasallo,
Los deberes feudales no fueron
establecidos de forma regular, pero más o menos incluían: -el
pago del rescate en caso de que el señor fuese hecho prisionero,
Y los derechos feudales incluyeron: -la
protección militar del vasallo,
Del término nobilis (lit. “hombre notable”), se trataba del grupo de personas que
sobresalían en una comarca, por cualidades
biológicas sobre todo. Representaban el 2-2,5%
de la población[136],
no tenían carácter hereditario, y su patrón de ascenso era fluctuante.
Salido o en relación habitual con la parroquia, este grupo empezó en el
s. XI-XII a hacerse reconocible, y a separarse del entorno. Empezaba a hacerse,
así, una cuestión familiar, y a
transmitir su situación destacada a través del nacimiento. Eso sí, su linaje
tenía que ser reconocido a nivel social por la gente y la opinión de la gente.
Su linaje se fue perpetuando al no
haber elecciones[137],
y al ir ellos llevándose bien con el párroco y el señor feudal[138],
sus instancias superiores. Poco a poco fueron adquiriendo armamento militar, y
esto les llevó a tener un status diferenciado, con exención incluida de
impuestos.
La vida del noble se fue haciendo
distinta del resto paulatinamente, con integración de: -poder,
con buenas relaciones con sus superiores,
Los 3 estratos nobiliarios fueron: -la
alta nobleza, formada por condes, príncipes… y descendientes directos de
la nobleza carolingia[139].
Pasaba de padres a hijos, y emparentaba a reyes con príncipes;
El proceso de homogeneización de la nobleza vino del: -factor
feudal, al participar todos de unos mismos privilegios[142],
y tener todos vasallos y superiores,
Unos simples combatientes a caballo acabaron
convirtiéndose en ideales sociales durante siglos. ¿Por qué? Por supuesto, la
relevancia que fue adquiriendo la caballería fue nuclear. Pero también se
fueron uniendo una serie de factores, como la lealtad, el valor, la generosidad
y el amor.
La lealtad del vasallo era la que
hacía que el valor
personal tuviera que inclinarse ante la voluntad del señor. La generosidad
del señor era la que enseñaba a todos a distribuir y despilfarrar[143]
aquello que se había recibido, y a rapiñar[144]
para poder seguir siendo generosos. En cuanto al amor,
es aquí cuando surge por 1ª vez la entrega voluntaria de una mujer a un hombre
para el matrimonio[145].
Y es que estos ideales caballerescos, de fondo germánico, vinieron a
recibir ahora el influjo
eclesial[146]
definitivo de: -tener
como finalidad la defensa de los desarmados[147],
Así, con la caballería como forma
de vida, la proyección que ésta empezó a tener fue enorme, y pasó
a formar parte de las personas desde la misma infancia, distinguiendo al noble
caballero del que no lo era.
Se requirió, para conseguir eso, un auténtico proceso de formación
caballera: -comenzando
en el entorno femenino familiar, hasta los 6 años,
Tras la investidura caballeresca, el caballero tenía como opciones
profesionales: -heredar
algún feudo, individualmente,
Consecuencia del mundo caballeresco fue la cultura
caballeresca que se fue generando a su alrededor, abierta a los jóvenes[155],
a los goces orales[156]
y a los goces del gesto[157].
La unidad ciudad-campo fue total en la Edad Media, y ambas fueron amigas
del feudalismo. Es más, el mundo rural fue el que envolvió y sustentó al
nuevo sistema urbano, surgido como otra estructura
feudal más.
La ciudad medieval tuvo, pues, los moldes y jerarquías
feudales importadas desde el campo. Y sus grupos urbanos[158]
vinieron de: -la
nobleza señorial, que pasó a nobleza urbana y ostentó el poder urbano[159],
Mención
aparte fueron los caballeros[161]
y el clero[162],
ya fuera en ciudades episcopales[163]
o no episcopales. Otros grupos que empezaron a surgir[164],
también trataron de ir introduciéndose en el poder municipal.
Fue el grupo resultante de la fusión de los distintos elementos
emergentes en la ciudad, y que con el paso de generaciones fue asumiendo las
riendas dirigentes de la ciudad.
Surgió en Milán[165],
donde la comuna
de Milán apoyó su poder en: -los
maiores, o herederos de la vieja
nobleza urbana,
Aquí, las rivalidades entre estos 2 grupos dirigentes hará que los cives
busquen apoyo en el popolo (o resto de grupos urbanos), para hacerse con el poder[166].
Y en general, cuando el popolo
comienza a adquirir poder, empieza a experimentar en su seno sus propias
distinciones[167]: -los
grassi, o dirigentes del popolo[168],
Con el tiempo, los estratos más inferiores fueron expulsando a los nobles de sus puestos elevados[170],
y el popolo se fue erigiendo en el
titular de todas las magistraturas. h.2) Relación entre clases sociales
En cada ciudad, las diferencias sociales comenzaron a mezclarse, con ideales
inter-clasistas unitarios. Se trataba, pues, de una sociedad
holística,
de solidaridad en medio de los conflictos.
Las principales diferencias sociales, no obstante
la solidaridad reinante, fueron manifestándose en: -distintas
opciones políticas, defendidas por cada grupo social[171],
Y los principales marcos
de integración fueron: -la
familia, nuclear urbana o amplia campesina[172],
que daba protección al individuo,
Por
su parte, empezaron a implantarse patrones
fiscales[175],
estableciéndose distintas cuantías de contribución fiscal, ya fuesen comunes
o cuantiosas. Muchos de los minuti
fueron exentos de impuestos[176],
y atendidos por los hospitales solidarios[177].
Fue la
sucesora del Imperio carolingio, que ante sus propias disputas internas y el
peligro exterior de las II invasiones bárbaras, había hecho disolverse a Europa en un puzzle de piezas cada vez más pequeñas,
aprovechado por el feudalismo: -para
extenderse por toda Europa a todos los niveles[178],
Llevó un ritmo distinto en cada
una de sus provincias, en cuanto que fue recogiendo los trozos fragmentados del
viejo Imperio carolingio, ahora dividido en los ducados de: -Sajonia,
con los sajones,
Disuelto el Imperio carolingio, los duques de estos 4 ducados vinieron a unificarse
para elegir a su propio rey[179],
uno de entre ellos cuatro, y capaz de agrupar a los demás. El año 911 ese
honor recayó en Enrique
I de Sajonia, que pasó a ser elegido como el primer rey de Alemania.
Comenzó con Enrique I (911-936), que tuvo que
hacer frente a los ataques húngaros y justificar así su nuevo status de rey de
los 4 ducados alemanes.
Otón I
(936-973), hijo de Enrique I, fue el vencedor definitivo sobre los húngaros en
la Batalla de Lech-955, convirtiéndose así en indiscutible en toda
Alemania.
Internamente,
Otón I llevó a cabo una auténtica re-estructuración civil, creando nuevos y
pequeños ducados, fieles al poder real general. Con el apoyo de la Iglesia,
empezó a multiplicar las sedes episcopales, entregando a los obispos los
grandes señoríos que iba creando civilmente[180].
En
tierras eslavas, y también en Italia tras el 950, Otón I intervino
personalmente, entrando en asuntos vecinos. El año 961 fue elegido rey de
Italia, y el año 962 fue coronado en Roma por el papa, como emperador del
Sacro-Imperio romano[181].
Se
trató de un proyecto de restauración nacional, dentro del emperador[182]
y de la fe[183],
que puso en marcha Otón I, y que vino a crear nuevas y vivas estructuras en las
sucesivas generaciones futuras[184].
Otón
II (973-983), hijo de Otón I, se casó con la princesa bizantina
Teófano,
con la idea de seguir restaurando la vieja idea imperial y volver a relacionar
al occidente con el oriente. También tuvo que hacer frente a la revuelta de
eslavos en la Alemania oriental.
Otón
III
(983-1002), rey con
1 año de edad (por muerte repentina de su padre Otón II), fue ayudado en el
poder por la nobleza alemana y su madre Teófano hasta que cumplió los 14. De
grandes cualidades, encomendó su reinado al consejo del obispo Gerberto de
Aurillac[185].
Renovó la alianza con el papado nada más subir al trono de Roma
Gerberto en el 999, teniendo lugar la alianza Otón III-Silvestre II y produciéndose
la Renovatio Imperii Romanorum, que
hizo de Roma el centro del nuevo Imperio: -con
la fuerza germana,
Los nuevos poderes emergentes de Polonia, Bohemia, Hungría[186]…
vinieron a integrarse también en esta Renovatio
Imperii, consolidándose de nuevo la Cristiandad latina.
La muerte repentina en 1002 de Otón III, con 22 años y sin mujer ni
hijos, vino a dejar su sucesión en manos de la nobleza
feudal, que se hace con el poder y va a condicionar los años futuros.
Hasta
la llegada de Conrado
II (1029-1039), Alemania vivió 27 años de parón imperial, hasta
que los señores feudales lograron ponerse de acuerdo y restablecieron el poder
real. Esto fue posible: -gracias
a la Iglesia,
Enrique
III (1039-1056), en colaboración eficaz con la Iglesia, supo
mantener el equilibrio rey-papado, cuando la Iglesia y su reforma gregoriana
empezaron a ir exigiendo independencia respecto de los poderes civiles.
Con Enrique IV (1056-1106), y la
apoteosis de la reforma gregoriana del papa Gregorio VII[187],
la crisis del Imperio alemán llegó a su punto más alto, cayendo
definitivamente todo equilibrio rey-papado, y todo equilibrio poder feudal-poder
episcopal[188].
Enrique IV intentó deponer al papa y elegir a su propio candidato[189],
obteniendo como resultado: -su
ex-comunión,
Penitente y de rodillas, el rey alemán se puso en camino hacia
el papa Gregorio
VII a través de los Alpes, en pleno enero de 1077, pidiéndole clemencia durante 3
días enteros frente al castillo de Canosa, ayunando y casi desnudo. No
obstante, obtenido el perdón, Enrique IV: -volvió
a Alemania, para ajustar cuentas con los príncipes alemanes,
Sus propios hijos acentuaron todavía más la crisis salia imperial,
mientras paralelamente la reforma gregoriana eclesial seguía dando sus frutos y
ganando nuevos adeptos.
Enrique
V (1106-1125) permitió finalmente, a través del Tratado de Worms-1122: -que
los obispos fuesen designados libremente por la Iglesia,
El camino de las investiduras, pues, iba camino de su solución, al
distinguir claramente cuál era el poder temporal y cuál era el poder eclesial[190].
A la muerte
de Enrique V, el Imperio germano estaba muy debilitado, sobre todo
por el auge que seguían teniendo los señores feudales. Dos fueron las dinastías
que entonces se disputaron la sucesión al trono: -la
dinastía Welf, de Baviera, más tradicionalista y pro-poder eclesial,
Federico
I (1152-1190) el Barbarroja, designado rey de Alemania por la Asamblea
de príncipes, tras la muerte de su padre en 1147[192]
y al unir ambas dinastías alemanas, tuvo 3 principios en su programa: -la
pacificación de Alemania[193],
Federico I logró imponer su programa en Alemania, pero no en Italia[196]
y mucho menos en la Iglesia[197].
En la Batalla de Legnano-1176 fue derrotado por la Liga lombarda de milicias
comunales, y en la Paz de Venecia-1183 tuvo que reconocer: -la
autonomía total de las ciudades italianas del norte,
Aun así, el matrimonio del hijo de Federico I[198]
con la princesa de Sicilia[199]
permitió al rey alemán hacerse con Nápoles y Sicilia[200].
Pero lo que dio realmente a Federico I el reconocimiento cristiano fue su
disposición a encabezar, personalmente, la III Cruzada a Tierra Santa, al mando
de 80.000 soldados alemanes[201].
Enrique
VI (1190-1197), hijo de Federico I y rey de Sicilia, sucedió a su
padre pero murió repentinamente[202],
lo que vino a hacer resurgir las guerras civiles entre: -los
Welfos, partidarios de romper la idea imperial,
El papa Inocencio III, con gran poder ya en toda Europa, intervino
entonces y decidió: -decantarse
por la idea de los welfos,
En
los años del 888 al 930, y en medio del declive
carolingio, la
situación a la que se enfrentaba Francia no parecía otra que la de seguir
gobernada por monarcas de ascendencia carolingia. Y así se mantuvieron las
cosas hasta el año 987, en que Hugo Capeto salió elegido como rey de los
francos, e inició una nueva dinastía monárquica en Francia: la dinastía
Capeta[203].
En
efecto, el año 888 había asistido: -al
destronamiento del último emperador carolingio, Carlos el Gordo,
En
el año 898 Carlos el Simple había logrado recuperar la corona imperial a la
muerte de Eudes[204].
Pero a la muerte de Luis V[205]
sin descendencia, la alta nobleza del reino decidió elegir a Hugo Capeto, duque
de Ile de France desde el año 960, como nuevo rey de la Francia Occidental.
Hugo
I
(987-996), hijo de Hugo el Grande y Hedwige de Sajonia, pertenecía a la
poderosa familia de los Robertinos[206],
destacados miembros de la aristocracia franca.
El
problema mayor con el que se enfrentó Hugo Capeto fue el de consolidar el poder
real y la monarquía. Para ello necesitó liberarse de la tutela de los últimos
carolingios y de los otonianos, hecho que consiguió con la ayuda de los obispos
Adalberon de Reims y Gerberto de Aurillac[207],
muy cercanos a la corte sajona (heredera imperial) de Otón I.
Supo
Hugo Capeto rodearse del apoyo eclesial[208]
y de las grandes casas feudales de la época[209],
emparentarse con el condado de Aquitania[210]
y convertir a la monarquía capeta en hereditaria, para no entrar en pugnas con
casas feudales ni con la casa imperial germana.
Roberto
II (996-1031) el Piadoso añadió a la dinastía capeta el ducado de
Borgoña[211],
el marquesado de Provenza[212]
y los condados de Dreux y Meluny[213].
De sus hijos nacerían relaciones con Flandes[214],
Inglaterra[215],
Portugal[216]
y Castilla-León[217].
Enrique
I
(1008- 1060), hijo y sucesor de Roberto II, y conocido como el “rey de París”,
tuvo todavía un poder real sobre Francia bastante mermado, no obstante las
alianzas de sus antecesores, y debido a la multiplicación de gobiernos locales
y señores feudales.
Fue
una época en la que los reyes capetos de Francia establecieron líneas de
vasallaje con personajes más poderosos que ellos, garantizando así el orden
social y futuro establecimiento de relaciones jerárquicas importantes.
Vino
a ver, bajo los reinados de Felipe
I (1060-1108), Luis VI (1108-1137) y Luis
VII (1137-1180), una paulatina recuperación política capetana. Este
auge de la dinastía vino motivado por 4 intervenciones e iniciativas[218]:
1º
Administración de las rentas.
Los Capeto utilizaron sus rentas feudales para promover los linajes con los
vasallos más fieles, pacificar las contiendas internas, conceder las primeras
cartas de libertad[219],
promocionar roturaciones de nuevas tierras[220]
y comercio[221].
Así mismo realizaron mejoras del régimen administrativo con los
prebostazgos, y consiguieron incrementos patrimoniales por guerra, vía
matrimonial y vía hereditaria. Así, empezaron a incrementarse los patrimonios
de Bourges, Corbie, Vexin y Gatinais.
2º
Política eclesiástica.
Desde Felipe I los Capeto empezaron a intervenir en las elecciones episcopales,
administrar las rentas de las sedes vacantes, impedir cambios en la administración
eclesiástica que pudieran serles adversos, y tener derechos de patronato sobre
los monasterios.
3º
Jerarquización de relaciones feudales.
En torno a la cúspide, y donde el rey podía intervenir en pleitos sobre
vasallos, o ejerciendo prerrogativas del señor en caso de viudedad.
4º
Promoción de principados.
En este siglo capetano se realizaron alianzas con Champaña[222],
intervenciones en Auvernia y Languedoc, y protecciones de sus dominios ante la
rivalidad con el resto de grandes señoríos.
No
obstante la intervención en la II
Cruzada tuvo consecuencias negativas para los Capeto desde el punto
de vista financiero[223],
político[224],
militar[225],
dinástico[226]
y territorial[227].
Considerado
como el primer rex Franciae, Felipe II
(1180-1223) tuvo como única preocupación en su reinado el incremento
del dominio real y la reducción del número y poder de los grandes principados.
A
medida que esto se iba produciendo, iba también Francia creciendo al exterior
como entidad común, bajo la autoridad de un rey: -que
no se basaba ya en los lazos de vasallaje,
Felipe
II reunió tierras por vía matrimonial[228],
hereditaria[229],
judicial[230]
y militar[231];
se apoderó de todos los territorios de los Plantagenet[232]
e incorporó Toulouse.
En
política interior
se alió con las comunidades urbanas y se apoyó en las clases populares.
Protegió el movimiento comunal, multiplicó las carta-puebla y respetó las
libertades municipales. Poco a poco fue consiguiendo la separación de los señores
feudales de la Curia Regia. Su Testamento[233]
fue la primera ordenanza general
sobre administración del reino. También durante su reinado tiene lugar la
construcción de la Catedral Notre Dame de París.
Dos
conflictos marcaron su reinado[234]: -el
conflicto con los Plantagenet, El conflicto con los Plantagenet fue uno de los últimos rescoldos feudales que opuso al vasallo (Plantagenet) contra el señor (Capeto), siendo más poderoso el vasallo que el señor.
Se
trató de una lucha entre dos dinastías, en la que Felipe II utilizó todos los
medios jurídicos a su disposición, así como los militares. Levantó a los
hijos contra el padre[235],
y fue un largo conflicto que duró varias generaciones[236]: -de
1180 a 1199, bajo los gobiernos de Enrique II de Inglaterra y Ricardo I de
Inglaterra, y en los
que Francia hace varias treguas (una de ellas en 1189 para acudir a la III
Cruzada);
En
cuanto a la incorporación
del Sur, ésta fue llevada a cabo por la intervención de: -los
caballeros norteños, sobre los cátaros, Significó la etapa en que los sajones establecidos en Inglaterra fueron, desde su cuartel general de Wessex: -dominando
todos los territorios ingleses, hasta entonces en manos de los anglos y
jutos, En efecto, ya Alfredo I (871-899)[240] había logrado someter a todos los anglos y jutos[241], pero no derribar las estructuras danesas vigentes en las islas aledañas, que iban cogiendo sucesivamente mayor fuerza. -con
los vikingos daneses, a cambio de dejarlos establecerse en la “continental”
Northumbría, k.2) Dinastía danesa
En Dinamarca, fue Svend I (985-1016)[242]
el que se decidió por el definitivo Asalto vikingo a Londres-994. La réplica
sajona no se hizo esperar, con matanza masiva de daneses en 1002. Tras ello, Svend I
ordenó el asalto y conquista total de Inglaterra, hecho que consiguió en 1013, y
continuó administrando en adelante bajo la política del Danelag[243].
Knut
II
(1016-1035) el Grande, hijo de Svend I, integró definitivamente a Inglaterra en
una especie de Imperio danés[244],
haciéndose llamar así mismo como emperador de los 5 reinos[245].
Knut II favoreció la mezcla de población anglo-sajona y escandinava, se
convirtió él mismo al catolicismo (y con él todo su Imperio vikingo), e hizo
de Inglaterra un reino escandinavo más:
-creando
un gran consejo real,
A la muerte de Knut II, los
seguidores del rey danés se fueron disolviendo poco a poco, e Inglaterra volvió
a ser retomada por la vieja dinastía sajona de Wessex, que hasta el momento
había estado refugiada en la Normandía francesa.
Eduardo
III (1042-1066) el Confesor logró restablecer el equilibrio en
Inglaterra, pero murió sin hijos y volvió a provocar un nuevo conflicto en la
historia de Inglaterra. Saltaron entonces al tablero las reivindicaciones de:
-la
dinastía sajona de Wessex, que propuso a Harold el Sajón, como prototipo
de rey indígena inglés,
La batalla estuvo servida entre Wessex y
Normandía. Hasta que en la Batalla de Hastings-1066 Guillermo
derrotó a Harold, invadió toda la Inglaterra, y entregó al ducado francés de Normandía
la corona inglesa[246].
Por 200 años, Inglaterra dejaría su influencia autóctona, y viviría mirando
hacia Francia.
La primera medida de Guillermo
I (1066-1087) como rey de Inglaterra fue recompensar a sus tropas
normandas, expoliando para ello las tierras de la nobleza indígena
anglo-sajona. En segundo lugar, fue el encargado de introducir las formas pseudo-vasalláticas
de la Normandía francesa en Inglaterra.
En efecto, el agrandamiento del patrimonio
ducal normando hizo posible una nueva
(y
no vieja) forma de feudalismo, en que empezó a ser el rey (y no el señor) el
que ejercía el vasallaje, mediante: -la
administración de justicia,
A nivel exterior, Guillermo I empezó a entablar relaciones con Roma
y el papa Gregorio VII, favoreciendo la reforma eclesial gregoriana, aún con acento inglés[247].
Guillermo
II
(1087-1100), hijo del anterior, tuvo que hacer frente a continuas rebeliones
anglo-sajonas, y murió casi repentinamente sin descendencia.
Enrique
I
(1100-1135), hermano del anterior, estuvo continuamente enredado en asuntos
eclesiales[248],
llegando a unos Acuerdos de Westminster-1107 con el papado de Roma, en los que se
distinguió[249]: -el
nombramiento de obispos, que haría la Iglesia,
Logró paulatinamente Enrique I que el ducado de
Normandía se fuese anexionando a la corona inglesa[250],
como un ducado más y al revés de lo inicial. Pero murió sin descendencia
masculina y dejó el asunto en el aire.
Tras la muerte de Enrique I: -su
hija Matilde, casada con Godofredo Plantagenet, reclamó la corona,
Entrados en negociaciones Godofredo[251]
y Esteban[252]
acordaron[253]: -que
reinase primero Esteban I (1135-1154) en adelante rey de Inglaterra,
Enrique
II, casado con Leonor de Aquitania (y heredero, así, de Aquitania y
Gascuña), vino a ser el instaurador del Imperio Plantagenet, dominando media
Francia y toda Inglaterra.
De explosiva relación con su mujer e hijos, Enrique II siguió políticas
fundamentales en torno a 5 líneas: -las
políticas anglo-sajonas antiguas, todavía muy feudalizadas[254],
Ricardo
I (1189-1199) corazón de León, su sucesor, fue guerrero cruzado y
vivió siempre fuera de Inglaterra. Hasta que fue apresado en
Austria[257] a la vuelta de
una Cruzada, y tuvo que dejar la regencia en manos de su hermano Juan.
Juan I
(1199-1214) sin Tierra, hermano de Ricardo I, perdió el ducado de Normandía en 1204
a manos del rey de Francia. Para intentar recuperarla, pidió dinero a los
barones ingleses. Pero éstos se le resistieron y revolvieron en 1214, teniendo
el rey que firmar una Carta Magna[258]
y limitar los poderes reales.
Una Carta Magna que sería ratificada en 1215 y que dio origen
a un Parlamento inglés: -bajo
25 barones consejeros del reino[259],
todos ellos Se trató de un producto de fabricación totalmente inglesa, fruto póstumo del ya fallecido s. XII, y que marcó el origen y espíritu del futuro s. XIII, impresionante en esplendor político y social, religioso y artístico, económico y cultural.
________ [1]
Vertebradas en torno a 3 ramas: -la
noruega, extendida sobre Escocia, Irlanda, Islandia y Groenlandia, [2]
Desde donde empezaron a arrasar todo el valle del Rihn, norte francés
y norte italiano. Hasta que: -OTON
I DE ALEMANIA los aplaste en la
Batalla de Lech-955, comenzando a restaurar el viejo Imperio carolingio, [3]
En la Provenza, donde establecieron su emplazamiento pirático y
centro de operaciones, para, desde ahí, ir saqueando los grandes lugares de
la Costa azul. [4]
Pues muchas ciudades se fortificaron, y esto hizo que mucha población
del campo viniese a buscar protección en la ciudad. Al crecer las ciudades,
pronto empezaron a convertirse en cabeceras de sus comarcas. [5]
Venidas de los monasterios y lugares aislados, con la intención de ser
escondidas en la ciudad. [6]
Salvo en los monasterios y zonas costeras, y a pesar del terror que habían
infundido en los viejo-europeos.
En
cuanto a las zonas dañadas del campo, éstas fueron fácilmente
recuperables. Aparte de que, tras las oleadas bárbaras, empezaron a
ofrecerse mejores condiciones para que la gente fuera a trabajar al campo,
desapareciendo casi por completo la servidumbre campesina. [7]
Conocido como el siglo de hierro, y bien estudiado por GUYBOIS. [8]
Con grupos enteros pasando al otro lado del Mediterráneo, permaneciendo allí
150 años y llenando Europa de optimismo y ejemplo moral, además de forzar
el crecimiento económico para hacer frente a pueblos enemigos más
poderosos. [9]
Conocida como la Drang Nach Osten
(lit. “Marcha hacia el Este”), que incorporó a cientos de miles de habitantes
en cientos de miles de km2. [10]
Que tras el establecimiento de daneses en su territorio, consiguieron el
primer régimen autónomo respecto a Francia, y se dedicaron a protagonizar: -la
conquista de Inglaterra, tras la Batalla de Hastings-1066,
Se trataba, en efecto, de jóvenes que trataban de buscar fuera de
Normandía otras oportunidades que no encontraban en su país, impulsados
también por el crecimiento demográfico. Y es que el feudalismo (que estaba
en el fondo) tenía que expulsar hacia fuera la población que no podía
asumir por dentro. [11]
El crecimiento demográfico siempre ha venido a producir crecimiento en
todos los sentidos, siendo las catástrofes su freno y causa de disminución. [12]
Muchas veces se ve que causas iguales han provocado fenómenos distintos. [13]
El consumo de las sociedades ha venido siempre: -por
el número de bocas a las que alimentar, [14]
Auténtico termómetro socio-económico de la joven Europa medieval. [15]
De forma acompasada, aunque las primeras décadas del s. XIII
marcaron el record. Fuerte fue la mortalidad, por otro lado, aunque la
natalidad marcó tasas inéditas. [16] Crecimientos netos (diferencia entre nacimientos-fallecimientos) en tablas de por mil. [17]
Tanto artesanos como armamentísticos. [18]
Que fue carísimo pero necesario, sobre todo en la comercialización de los
clavos. Así, se fue sembrando Europa de hornos de fundición, canteras y
otros procedimientos complejísimos de elaboración del hierro. [19] Como material masivo y primordial de construcción, y no sólo para los monasterios, iglesias o fortificaciones, sino también para los edificios públicos. Su urgencia era obvia: evitar los incendios (pues había construcciones de madera que en un año se incendiaban 6-7 veces). [20]
Con la mente puesta en el arado, y el objetivo de poder penetrarlo más
hondo, no perder la semilla, y mejorar la calidad del fruto. [21]
Para que el animal pisara el suelo más firme, arrastrara así mejor la
carga y pudiera hacer más largas distancias, durando más años su vida
laboral. [22]
Con: -collarón
en la cabeza, y no en el pecho; [23]
Siendo ésta la señal de que Europa podía competir con las
civilizaciones más avanzadas. Pero para ello necesitó mejorar mucho su
velocidad y destreza, y el cuidado de las razas especiales. [24]
Pues se requería producir mayores cantidades en el menor tiempo posible, y
para ello fue necesario una alimentación cara y delicada de los animales. [25]
Existentes desde el s. II a.C, y que no habían podido ser explotados
hasta ahora, que fue cuando el hombre hizo el gasto necesario para ponerlos
en funcionamiento. No obstante, ya en la época carolingia había tenido
cierto despertar el molino de agua. [26]
Obteniéndose 1,5 toneladas de grano al día, y dando trabajo a 40 personas
diarias. [27]
Que acababan encorvadas por la posición incómoda que adquirían en
el molino harinero. De ahí vienen los esqueletos deformados de las mujeres
medievales. [28]
Que representaba el 80%
de la dieta medieval, basada en el pan cereal. [29]
Del término batan (lit. “instalación industrial del
molino”), que utilizaba el molino para que la
lana perdiera sus cualidades, y pudiera así ser tintada adaptadamente al
tejido. [30]
Hasta la llegada del pergamino, en el s. XIV. [31]
Pues del molino obtenían los obreros la maquila (o beneficio en
%
del grano, que se quedaba el propietario del molino). [32]
A lo que se añadirá con el tiempo (s. XII) la revolución comercial. [33]
El arado romano, todavía utilizado, podía utilizarse para tierras
sueltas mediterráneas, pero no para tierras pesadas y más fértiles del
norte, ya que no ahondaba y se quedaba en la superficie. [34]
Lo que fue creando lazos comunitarios, perdiéndose así el sentido
de individualidad en el campo. [35] Dividiendo la tierra cultivable en dos, y dejando descansar a la mitad. [36]
Pues no existía el abono. [37]
Llamado también cultivo de vecería, al dar cosecha una vez, y otra no. Fue
el más utilizado en el sur, en contra de lo que se hizo en el norte (donde
la explotación agraria fue total). [38]
Dividiendo la tierra en tres: 1 cosechable, 1 plantada en otoño, 1
descansando en invierno y plantada en primavera con avena o centeno (que
aumentaba su productividad). [39]
Dividiendo la parcela en cuatro: 1 de barbecho, 1 con cereal de otoño,
1 con cereal de primavera, 1 de leguminosas (judías, garbanzos…), pues
las legumbres nitrogenaban la tierra, y por otro lado completaba la dieta
medieval. [40]
Por requerir pocos cuidados, y jornaleros del pequeño campesinado. [41]
De azul precioso, y cultivada en el sur de Francia. [42]
Del Centro Europa, y para la fabricación de la cerveza. [43]
Como las frutas, verduras… por lo que se situaron en los alrededores de
cada ciudad. [44]
El olivar, el moral para la seda, de espárragos, alcachofas, melones, cítricos
orientales (introducidos por los cruzados)… [45]
Como eran los regadíos de Sicilia y Toscana… [46]
Nada más hay que analizar los ss. XV y XVI, siglos de oro del mundo
agrario europeo, y que posibilitaron, entre otras cosas, los abastecimientos
urbanos. [47]
A cargo de obispos y señores feudales. [48]
Casi siempre abandonadas. [49] Surgiendo así miles de pueblos campesinos, y grandes migraciones hacia zonas nuevas, donde se prometía mejoras jurídicas, fiscales y de fueros. Sobresalieron, en ese sentido, las comarcas del valle del Po, la Gascuña francesa, los pantanos de Inglaterra, la zona salina de Flandes, la España del norte y la Alemania del este. [50]
Donde se abrieron roturaciones para espacio ganadero, y se estudiaron las
estructuras finales de las villas, aldeas y sus espacios forestales. [51]
Pues los ganados mediterráneos optaban por la trashumancia, dirigiéndose
hacia el sur en invierno, y hacia el norte en verano. [52]
Y que se había dado por concluido en los ss. IV-V, cuando la gente
empezó a abandonar las ciudades romanas para desplazarse hacia el campo,
con la convicción de que el futuro estaba ahí. [53]
Modelo que además Europa ha ido extendiendo por todo el mundo, no
obstante la infinidad de otros modelos urbanos existentes. [54]
Pues los invasores bárbaros se fueron instalando más bien en el campo, con
escasas actividades y escasa población. [55]
Donde sí se puede hablar de desarrollo, el que empezó a surgir en
las viejas ciudades romanas, y en nuevos núcleos costeros y fluviales,
sobre todo en el norte europeo y la zona de Frisia-Holanda.
Se trataba de los portus o wiks, núcleos duramente castigados después por los normandos, y
cuyos comerciantes caravaneros (todavía semi-bárbaros) desaparecieron o
mal-revivieron en siguientes periodos. [56]
Un refrán alemán decía que “el aire alemán te hace libre”, en este
sentido urbano. [57]
Que en el s. XII tuvieron que ampliar sus murallas, para introducir a los
burgos en su interior. [58]
No siempre bien vistos desde la civitas, por sus fraudes y usuras. [59]
Y las sublevaciones de mercaderes, para adquirir más poder, también. [60]
Sobre todo en Italia y sur de Francia, que mantenían todavía las termas…
y estructuras romanas. [61]
Contagiado por el esplendor de la norteña Ile de France, pero tampoco al
mismo nivel que Italia. [62]
Dinastías enfrentadas que fueron fundando bastidas o establecimientos urbanos en torno a la Gascuña y
Pirineos, para ir ellos ocupándolas y asentando en estas zonas su poder.
Fue así como, por ejemplo, los CAPETO fueron recomponiendo todos los
enormes condados franceses y poniéndolos al servicio de la corona francesa
(fraccionada y casi recluida a París). [63]
Como término medio de lo que fueron los centros de poder de los señores
feudales. [64]
Fundadores, entre otras, de Kiev, donde surgirá una de las primeras dinastías
rusas. [65]
Bohemia, Eslovaquia, Croacia, Transilvania… [66]
París, por ejemplo, empezó a absorber toda la población existente en un
radio de 100 km, al igual que otras muchas ciudades empezaron a absorber
población en un radio de 50 km. [67]
Que se introdujo en el campo por admiración a lo que se vivía en la
ciudad. [68]
Que, a diferencia de Bizancio o las ciudades musulmanas (millonarias
en habitantes), alcanzaban escasos números de habitantes, destacando: -París,
Milán y Venecia, con 150.000 habitantes,
A esto hay que añadir más de 70 ciudades con más de 10.000
habitantes, sin contar las no-clasificables Toledo y Roma. [69]
Como el cereal, el vino, la carne y leche… [70]
Como la lana, el carbón, la madera… Siendo directamente proporcional el
tamaño de una ciudad con el tamaño de la mancha de deforestación
producido a su alrededor. [71]
Venida con sus hábitos, rentas… y que vino a eliminar toda
diferencia entre lo urbano y lo rural. [72]
Fundamentado principalmente en la industria textil. [73]
Pues el trueque empezó a no funcionar cuando las cantidades empezaron a
crecer. [74]
En las cecas, o talleres de acuñación de moneda. [75]
Para evitar así valores especulativos, y por la gran diversidad de
orígenes monetarios. En esta Edad Media, el valor de la moneda lo establecía
el sentido común de la gente, que acogía o rechazaba una moneda por otra.
Casi todas ellas eran emitidas en plata, dada la ausencia de oro, y con la
equivalencia de 1:12 a nivel oro-plata. Por otro lado, la moneda real era la
única que tenía un valor fijo, debiendo pagar el resto de monedas sus
diferencias al monarca, por sus movimientos respecto a la moneda real.
La
moneda de cobre, o moneda de vellón, impuesta por la Edad Moderna, va a
entrar en el mundo especulativo, pero por decisión unánime del mundo
entero.
Y
los billetes fueron introducidos por los EE.UU, al valorar la gente ya más
los documentos impresos y firmados que los escasos metales de la Antigüedad,
y por el auge de los bancos. No obstante, esto fue lo que produjo la crisis
de 1929 (al utilizar la colonización las hojas de tabaco como moneda) y de
2009 (al hipotecarse los bancos con la gente más del dinero real que había
en el exterior). [76] Como el ducado de Venecia, el florín-flor de lis de Florencia, el garun de Cádiz... [77]
En Génova, y en otras ciudades libres, la moneda empezó a ser señal
de su soberanía sobre el resto de ciudades. Muchos señores feudales también
quisieron emular a estas grandes ciudades y acuñar moneda, pero esto fue un
fracaso y quedó como algo residual en Francia. Pues acuñar moneda
conllevaba: -pagar
al rey la diferencia, ya que él tenía en su poder la emisión de la moneda
real, [78]
Una ciudad escocesa, por ejemplo, no pasaría de ser un burgo en Italia. [79]
Pues una ciudad en auge podía pasar a ruralizarse debido a escaseces, o a
preferencias poblacionales. [80]
Nacidos casi siempre como cofradías religiosas, en torno al santo
patrón y la parroquia. Así, los que 100 años atrás eran vikingos
asaltando barcos, ahora vivían en sociabilidad y trabajaban siempre a nivel
conjunto, y nunca individualistamente. En este sentido, fueron estrechos los
lazos (religiosos, de parentesco, de interés…) entre comunidades
gremiales, estableciéndose a vivir todos juntos y creando cofradías,
asociaciones obreras, propios tribunales, propio ejército… [81]
Flandes, el norte de Francia y el norte de Italia vinieron a ser los focos
originales de esta organización gremial urbana. [82]
Con propios tribunales para revisar la calidad de sus productos,
materias primas y precios, e imponer sobre ellos su propio sello de calidad.
Si un producto era sellado como “obra falsa” podía ser penalizado, y si
era sellado como “obra maestra” podía ser premiado. [83]
Para lo que fue clave la figura de la universidad, pues en ella los gremios
configuraron sus valores, disciplinas y planteamientos. No obstante, estaba
prohibida la competición entre los propios miembros de un gremio, y la
unidad tenía que estar por encima de todo.
Aunque cierto obstáculo a este mundo del bienestar fue el rechazo
generalizado que hubo a la novedad, incluidas las mejoras técnicas o
recetarias. Pues éstas eran vistas como un peligro a la ruptura de la
unidad, y ésta debía estar por encima de todo valor. [84]
Con propias etapas de destreza, y haciendo pasar a los candidatos de
aprendiz a capataz.
El
aprendiz, en los contratos que hacía, pasaba a vivir y forjarse totalmente
integrado en una familia, y cuando llegaba al rango de oficial, era sometido
a un examen (dándosele entonces el maletín de herramientas). Si quería
seguir ascendiendo hasta maestro, tenía que ir pasando muchas más pruebas
y distinciones más elevadas. [85]
Sucediendo más bien lo segundo, para apoyar su expansión. [86]
Donde unas ciudades copiaban los fueros de otras ciudades. [87] Donde los fueros de Lubeck y Magdeburgo fueron copiados por cientos de ciudades desde la Alemania Central hasta Ucrania y Rusia. [89]
Para almacenamiento de los productos, principalmente. [90]
Las tiendas vendrán un poco después, en las ciudades y como comercio ya
especializado. [91]
De herramientas, utensilios… [92]
En las conocidas como Paz de
Dios, o periodo de la semana donde no se podía atacar al enemigo, con
ausencia de armas y conflictos, y enteras huestes de obispos-señores
feudales para atacar a los que no respetaran estos días de tregua. [93]
Conocida como la Paz de mercado,
consistente en el no uso de la violencia, transacciones justas, devoluciones
y compra-venta en igualdad… [94]
Conocida como la Paz del camino,
establecida ante el bandolerismo, y ya desde las vías reales y principales
hacia los mercados. [95]
Destacaron las ferias de Winchester y Standford, Brujas y Flandes,
Pavía y Milán, Colonia, Valladolid, Sahagún y Medina del Campo… [96]
Estado feudal de los condes de Champania, muy en relación con el rey de
Francia. [97]
Hasta el s. XIII, que es cuando el Mediterráneo comienza a abrir nuevas
rutas marítimas comerciales, desde Italia al Estrecho, y desde el Estrecho
hacia Inglaterra. [98]
De todo tipo de paños y lana inglesa. [99]
De todo tipo de lujos venidos del Oriente. [100]
Como la seda, el bálsamo, joyas… y todo tipo de especias orientales que
tenían poco peso y generaban mucho dinero (lo que hacía merecer la pena su
comercialización a través de largas distancias). Destacaron entre estas
especias: -la
gasa, venida de Gaza, [101]
Como los cereales, vino, sal, lana, madera, textiles, pescados salados,
hierro, metales no preciosos… productos de grandes volúmenes y que
generaban poco dinero (pero que empezaron a merecer la pena por las
gigantescas cantidades de venta, y tras los cambios técnicos generados en
los transportes de larga distancia). De mención especial era: -el vino,
que podía llegar “mareado” por
el viaje marítimo (es decir, deteriorado), [102]
Como fueron los inventos de la brújula (importada de China), la
cartografía (o cartas de marear), los astrolabios (para la observación)…
que cambiaron las rutas de cabotaje por rutas de mar adentro, acortando las
distancias y ampliando al año entero el periodo de navegación.
Así fue como los portugueses comenzaron a desarrollar los viajes oceánicos,
sobre las Canarias, Azores e islas atlánticas. [103]
Que se fueron adaptando a las nuevas rutas atlánticas europeas. En
ese sentido, fue clave: -la
sustitución de los barcos normandos (alargados, a remo o vela maniobrable), Este invento alemán, del s. XII, requería tripulación para mover sólo las velas y el timón acuático, y no para remar. De aquí tomarán su molde los galeones portugués y español. [104]
Semi-nómadas y de clanes familiares numerosos, con tierras abundantes. [105]
De cultura y cristianismo superficial, con clanes dominados por caciques,
vivientes en cabañas, y que habían permanecido así 400 años después de
la ocupación romana. [106]
Sin vínculos de sangre ni los mismos intereses, pero suponiendo ya un
esfuerzo civilizacional. [107]
Para vivir con sus seres queridos, y por la paz y ausencia de conflictos que
generaban. [108]
Se puede decir, en ese sentido, que el feudalismo fue un fenómeno de
abajo hacia arriba, con nobles encabezando la búsqueda de refugios para la
población. [109]
Según G. DUBY. [110]
Y no siguiendo ya los rituales ancestrales, paganos y campesinos (de pagus,
lit. “pagano campesino”). [111]
Pues el templo era algo que pertenecía a su comunidad, y creó lazos
y patrones municipales. [112]
Tanto de ocio y festividades como de funerales, bodas, nacimientos,
juventud… [113] Inculcándoles a ellos la perpetuación de las tradiciones, la construcción de las edificaciones, la administración de los bienes [114]
Poderes derivados del poder del ban germánico (como capacidad que se tenía de ordenar o prohibir a
otro bajo pena de castigo), como poder fáctico que se apropiaron los señores
feudales del antiguo poder germánico.
El
rey no tuvo otro remedio que reconocer estos poderes feudales, negociando
con ellos. Pero nunca vino a dejar, jurídicamente, de ejercer esos poderes
que eran suyos, a pesar de la apropiación que hicieron de ellos los señores
feudales. [115]
Por reconocimiento del señorío, de que “ese es su señor”. [116]
Pagados desde tiempo inmemorial al rey, y que ahora pasaron a ser pagados al
señor feudal. [117]
En la época romana tuvo carácter urbano y no estatutario. [118]
Cartas, estatutos y fueros que fueron extendiéndose desde Noruega hasta
Sicilia. [119]
Hacia 1050 casi el 50%
de la población vivía en servidumbre, carga que empezó a liberarse de ahí
en adelante. [120]
Mediante una compensación que se tuvo que pagar a los señores
feudales, por la permisión que habían dado de libertades y liberación de
cargas. [121]
Aunque sí que hubiera maduración moral, pero no hasta tal punto. [122]
Y no ya sólo de la racionalización y subsistencia. Esta élite fue tirando
de los demás en todos los niveles, y también en los conflictivos. [123]
En ese sentido decía un dicho inglés que “la educación de un niño
comienza 100 años antes de que nazca”, aludiendo a que muchas veces el
ascenso social venía determinado por los orígenes familiares. [124]
Salvo por la península Ibérica, donde únicamente Cataluña fue impregnada
de este sistema feudal. [125]
Vitalicio, y con posibilidad de renovación hereditaria. Aunque podía
quedar roto: -por
felonía-deslealtad, si el
vasallo no era fiel a la palabra, [126]
Lo más importante en la mentalidad medieval, al hacer contraer obligaciones
a unos respecto de otros. [127]
Que vino a favorecer también los intereses generales de la sociedad. [128]
Homenaje de la inmixtio manuum,
o unión-fusión de manos, pues el señor cogía las manos unidas del
vasallo, que de rodillas se las ofrecía. [129]
Con el rito del volo (lit. “quiero”) y del osculum (beso entre
ambos en la boca, y símbolo del feudalismo). [130]
Que a veces los vasallos guardaban en cofres dentro de cofres. [131]
La prueba material de haber tomado posesión de la tierra. [132]
Sin traspaso de propiedad, pero sí con adquisición del rendimiento. [133]
Incluido el deber de acudir a la corte del señor para aconsejarle, y
apoyarle en todas sus empresas. [134]
A veces superficial, pero en otras ocasiones de forma total. [135]
Pues a veces vivían todos sus familiares en castillo, en habitaciones
individuales o comunes. [136]
Es decir, había de 3 a 4 nobles por aldea rural. [137]
Eso sí, siempre abierto a fluctuar, y no a cerrarse en una casta noble. [138]
Muchas veces al casarse con una hija del señor, que es lo que venía a
perpetuar su linaje. [139]
Como el conde de Tolosa, el duque de Normandía, el duque de Baviera…). [140]
De la que dependían vasalláticamente. [141]
Era inconcebible a un noble del s. XI-XII sin su caballería ni experiencias
caballerescas. Fueron, en ese sentido, los “deportistas” famosos de hoy
en día. [142]
Como el de tener tribunales especiales, sin tener que pasar por tormentos
judiciales y penas degradatorias. [143]
El ahorro, e incluso la previsión, eran totalmente ajenos a este ideal
caballeresco. Por otro lado, lo peor que podía ser visto era a un noble
usurero (de ahí que DANTE pusiera en su Divina Comedia a un avaro como el último en entrar en el infierno). [144]
Como elemento germánico heredado desde antiguo, aunque ahora fuese
cristianizado en el s. XI-XII. Pues al haberlo gastado todo, el caballero
tenía que seguir buscando otras formas para seguir siendo generoso. [145]
Por extensión de lo que fue la relación y vínculos caballerescos, que
perdieron la vergüenza a manifestar públicamente las relaciones entre
nobles y guerreros.
No obstante, fue un freno en el s. XII a este amor cortés, surgido
en los entornos cortesanos, el choque de fidelidades surgido con las
investiduras, en que un eclesiástico: -ya
tenía vínculos con otro señor espiritual, Dios, [146]
Según recogía el propio SAN BERNARDO, que supo mezclar definitivamente los
ideales romanos, germanos y cristianos, y dar a Europa una nueva forma de
vida, la caballeresca. [147]
Como era la Iglesia y la población indefensa. [148]
En torno sobre todo al ideal de Cruzada. [149]
Haciéndole matar animales. [150]
Haciéndole manejar armas de 15-20 kg a lo largo de varias horas. [151]
No clerical pero sí muy asociado al mundo clerical. [152]
Siempre superior a la de su origen natal, y donde un padrino lo apadrinaba
hasta su investidura como caballero. [153]
En una ceremonia, pseudo-sacramental y costosísima, y que tenía como
rituales: -baño
purificatorio, [154]
Y que se financiaba y auto-promocionaba a través de los torneos regionales,
y en diversos servicios que podía hacer en muchos sitios. Es el caso de
muchos caballeros que vencían en los torneos a sus señores, capturándolos
y pidiendo por su rescate una fortuna. [155]
Con valores propios para su edad, y ofreciéndoles un futuro y puertas
abiertas para sus vidas. [156]
Como fue la elaboración de: -los
cantares de gesta, surgidos en el norte francés, y que empezaron a
reproducir la fidelidad del señor y dama (elemento tomado luego por el
Renacimiento)… [157] En torno a los símbolos propios del grupo caballeresco, a la heráldica o cultura de los escudos de armas… Y es que la heráldica vino a convertirse en el signo diferenciador de cada familia, y en una moda que introducía emblemas de armas en la ropa, casas, libros, cubiertos, caballos… originando toda una serie de teorías sobre los colores, imágenes, flores... [158]
Como los burgueses (secundarios y
residuales), los magnati, los potentes,
los hombres buenos, los meliores (o dirigentes)… [159]
Nobleza que levantó los edificios más nobles de cada ciudad, y que
ha conservado el poder hasta hoy día. [160]
Como ministeriales o
funcionarios públicos, que fueron ocupando cargos urbanos según iban
recibiendo las cartas del señor de la ciudad. [161]
O milites. [162]
Con los párrocos constituidos en auténticas fuerzas activas en el
gobierno de la ciudad, trasladando los modelos eclesiásticos a los modelos
civiles. De hecho, durante largo tiempo, los mismos cabildos municipales
estuvieron reuniéndose en las parroquias. [163]
Donde vivía la familia del obispo (encargada de administrar la
ciudad) y los canónigos de la catedral. [164] Como los mercaderes, los banqueros. [165]
Y en todo el arco norte de Italia, pues en otros lugares (como Venecia)
nunca se permitieron estos movimientos populares. [166] Es aquí cuando surge la invención de los gremios europeos. [167]
Por otro lado necesarias, a consecuencia del crecimiento urbano, la
estratificación y la asunción en el poder de los grupos emergentes. Ahora
bien, en todos los grupos pertenecientes al cives sólo hubo diferenciaciones económicas, debidas a las
diferentes contribuciones fiscales. [168]
Lit. “cuantiosos”, refiriéndose
a su renta. [169]
Lit. “comunes”, en español. [170]
Que fue perdiendo poder en pos de la nueva línea burguesa. [171]
Lo que en España fueron los bandos,
a nivel sólo gremial. [172]
O el mismo clan aristocrático, con sus propios parientes mayores, intereses
y estructuras internas. [173]
Que fueron uniendo a ricos y a pobres. [174]
Como la parroquia, cementerio-mercado, tabernas, fuentes, lavaderos, baños… [175]
Pagos de impuestos a la ciudad, que en el s. XIII vinieron a ser el elemento
fundamental de la ciudad, siguiendo el modelo trinitario medieval: los que
oraban, los que luchaban, los que trabajaban. [176]
Entre el 20-30%
de la población, pues eran pobres sin salario, sin bienes, ínfimos
obreros, viudas (muchísimas, dado que se casaban con hombres 15 años
mayores que ellas), inmigrantes de campos, arruinados por las crisis
alimenticias, enfermos, mendigos… [177]
Existentes desde 1150 en las ciudades, por fundación religiosa o
urbana, y que acogían a los enfermos, pobres, niños abandonados,
peregrinos… Destacó el Hospital de Dieu de París, que durante siglos fue
el modelo copiado en todas las zonas de Europa. [178]
Viviendo su época dorada de 1000 a 1300, y alargándose hasta la revolución
francesa de 1789. Epoca en la que impregnó todos los lugares e
instituciones, salpicando también a las civilizaciones bizantina e islámica. [179]
Sin disolver, eso sí, el poder e independencia de cada ducado. [180]
Para contrarrestar, así, el poder de los 4 duques sobre el rey. [181]
162 años después de la coronación, también en Roma, de CARLOMAGNO como
emperador del Sacro-Imperio romano. Ambos dos, Carlomagno y OTON I DE
ALEMANIA, como
eslabones claves para que el Imperio romano se alargase hasta la I Guerra
Mundial-1914. [182]
Como rey de reyes. [183]
Volviendo al cesaropapismo de CONSTANTINO, con intervenciones conjuntas
entre Iglesia y Estado. [184]
Tanto de los países eslavos como de los céntricos e incluso en Italia. [185]
Gran sabio de Vic, y futuro papa SILVESTRE II, cuya relación con OTON III
DE ALEMANIA motivó las leyendas bretonas sobre el rey ARTURO y el mago
MERLIN,
sobre el sabio y el futuro rey. [186]
De lo cual fue inédita la peregrinación personal que hizo OTON III
DE ALEMANIA a la tumba de SAN WENCESLAO DE PRAGA, con la idea de reunir a las nuevas
fuerzas eslavas al proceso imperial. [187]
Que iba extendiendo por toda la Cristiandad la idea y puesta en práctica de
la independencia total eclesial, respecto de todo poder civil. [188]
Pues con la separación de la Iglesia respecto de los poderes
feudales, las rentas de los señores feudales y del mismo rey empezaron a
caer estrepitosamente. [189]
El arzobispo de Milán. [190]
Proceso que, solventado en Occidente tras 100 años, nunca se desarrolló en
Oriente. [191]
De ahí el ser llamados, despectivamente por los italianos, como los
gibelinos. [192]
El conde FEDERICO II DE SUABIA, casado con JUDIT DE BAVIERA, y cuyo hijo
FEDERICO I DE ALEMANIA había participado enérgicamente en la II Cruzada.
Dos fueron los motivos por los que los príncipes lo designaron a él: la
unión que hacía de dos casas y ducados, y su capacidad enérgica para
hacer frente a los problemas generados por los ENRIQUES de la dinastía
Salia. [193]
Colaborando con los linajes ducales, y resaltando sobre ellos la autoridad
del emperador. [194]
Ejecutando efectivamente el Tratado de Worms, y no yendo más allá (como
hacían los obispos alemanes). [195]
Sobre todo en aquellos lugares del Imperio (como tuvo que hacerlo en Italia), donde el honor del emperador había quedado muy debilitado. [196]
Que estaba muy ligada ya a un papado rejuvenecido y fuerte, y donde
el norte italiano: -empezaba
a coger auge urbano, con comunas incluidas, [197]
A pesar de los esfuerzos de los consejeros de FEDERICO I DE ALEMANIA (clérigos todos
ellos), y las embajadas del gran REINALDO DE LAISSER. [198]
ENRIQUE DE SUABIA. [199]
CONSTANZA DE SICILIA, hija del rey ROGER II DE SICILIA. [200]
Poder que empezaron a ejercer sobre la isla los STAUFEN, con grandes
oposiciones de los bizantinos, que tenían aquí grandes intereses
comerciales. [201]
Donde murió, también desgraciadamente, en un río de Cilicia, poniendo así
fin al sueño de restaurar el gran Imperio occidental, reconciliado con el
papa. [202]
Con un hijo muy pequeño. [203]
Que durará en Francia más de 8 siglos (hasta 1848), y dará origen a
dinastías y alianzas monárquicas en España, Portugal y Brasil. [204]
Conocido como ODON, hijo del conde ROBERTO DE ANJOU. [205]
LUIS IV DE FRANCIA, LOTARIO y LUIS V DE FRANCIA serían los últimos
soberanos carolingios del país galo. [206]
Destacables por la defensa de París ante los normandos. [207]
cf. PARISSE, M; La Cristanitá occidentale alla metá del Seccolo XI, ed.
Borla,
Roma 1997. [208]
Y de los principales obispos de la época. [209]
Como fueron sus principales aliados, el ducado de Normandía y el condado de
Anjou. [210]
Al casarse con ADELAIDA DE AQUITANIA. [211]
Por alianza matrimonial, al casarse con su prima BERTA DE BORGOÑA. [212]
En nueva alianza matrimonial, pues el matrimonio con BERTA DE BORGOÑA había sido
anulado por el papa. [213]
Que arrebató a la nobleza por la fuerza. [214]
Por su hija ADELA, casada con BALDUINO V DE FLANDES. [215]
Por su hija MATILDE, casada con GUILLERMO I DE INGLATERRA. [216]
Por su hijo ROBERTO DE BORGOÑA, abuelo de ALFONSO I DE PORTUGAL. [217]
Por su nieta CONSTANZA DE BORGOÑA, casada con ALFONSO VI DE CASTILLA. [218]
Descritas por M. PACAUT. [219]
Concedidas en el año 1155 en Gatinais por LUIS VII DE FRANCIA (cf. CALVA, J. L; Los
campesinos y su devenir en las economías de mercado, p. 498). [220]
Sobre todo durante el reinado de LUIS VII DE FRANCIA, en cuyo mandato la
agricultura se transformó, y la población aumentó con densidades de
poblaciones líderes en Europa. [221]
Como la parisina Feria del Lendit, bajo LUIS VII DE FRANCIA, y como privilegio
concedido a los “parisinos del Sena” en el año 1170. [222]
Con objeto de asegurar la frontera de Borgoña con los reinos de Alemania. [223]
Ya que la expedición había dejado empobrecido considerablemente el tesoro
real. [224]
Pues los años de ausencia de los monarcas en la Cruzada habían disminuido
su capacidad de actuación de cara a los grandes y competidores señores
feudales. [225]
Pues la II Cruzada había supuesto una concatenación de derrotas militares. [226]
Pues provocó la ruptura matrimonial de LUIS VII DE FRANCIA con LEONOR DE AQUITANIA
(poseedora de toda la Francia desde el Loira hasta los Pirineos). Pues
Leonor había decidido asistir a la II Cruzada con su marido, y parece ser
que en Antioquía tuvo un romance con su tío RAIMUNDO DE POITIERS. Obligada
a volver a Francia por LUIS VII, la reina aguardó el regreso del monarca
francés, en cuyo momento le pide la separación matrimonial, obtenida del
papa al existir entre ambos parentesco familiar. [227]
Ya que tras la separación de LEONOR DE AQUITANIA con LUIS VII DE
FRANCIA, ésta
recuperó los territorios que había aportado como dote. Y porque al casarse
de nuevo Leonor con el rey de Inglaterra, este matrimonio supuso la cesión
de territorios franceses a la corona inglesa, haciendo de Inglaterra la
mayor competidora de Francia. [228]
El condado de Artois. [229]
Los condados de Valois y Vermandois. [230]
El condado de Amiens. [231]
El condado de Auvernia. [232]
Excepto Guyena. [233]
Documentado en el año 1190 (cf. BAILLY, A; Les Grands Capétiens, París, 1952). [234]
Importantes porque supusieron, sobre todo en el conflicto con los
Plantagenet, la destrucción del poderío feudal real en todo el reino. [235]
ENRIQUE EL JOVEN contra RICARDO CORAZON DE LEON, JUAN SIN TIERRA contra RICARDO
CORAZON DE LEON, ARTURO DE BRETAÑA contra JUAN SIN TIERRA… [236]
Lo que hizo a estos años ser cruciales para la construcción de Francia en
torno a la realeza. [237]
Fortaleza clave para el control de la Normandía, que cayó en 1202 en sus
manos tras 9 meses de sitio. [238]
Entre 1204 y 1208. [239]
En la Batalla de Muret-1213, y que tuvo como consecuencia la incorporación
del condado de Toulouse a Francia (pues hasta entonces había pertenecido a
Cataluña-Aragón). [240]
Cuya dinastía sajona se había establecido en el Reino de Wessex, liderando al resto de
reinos ingleses no daneses. [241]
Del año 450, tanto anglos (sur danés) y jutos
(norte danés), mezclados desde el principio con diversos componentes étnicos,
habían provocado la convivencia simultánea en Inglaterra, hasta bien
entrado el s. VIII, de: -grupos
de tribus, establecidas por el héroe que un día las acaudilló e
instaló,
En el s. VII y bajo la hegemonía militar que empezó a adquirir el
rey EDWIN I DE NORTH UMBRIA (617-633) sobre la Bretaña, todas las
estructuras clánicas británicas empezaron a conectarse unas con otras. El
cristianismo impulsado por Edwin fue unificando la cultura insular, y la
adopción de la estructura condal por parte del Reino de Wessex, a finales del s. VIII, fue la modélica para el s. IX y
siguientes. [242]
El de la barba partida. [243] Término referido al Oriente Inglés, bajo dominio de reyes daneses y leyes danesas. [244]
Junto a Dinamarca, las Islas Feroe, Noruega, Suecia y el arco nórdico. [245]
Dinamarca, Noruega, Suecia, Islas Feroe e Inglaterra. [246]
Y con ella: -todos
los moldes feudales franceses, [247]
Con prerrogativas sobre el nombramiento del clero. [248]
Por cuestión de las investiduras. [249]
Gracias, sobre todo, a la intervención del obispo ANSELMO DE CANTERBURY,
llamado a Roma para aclarar y dialogar todos estos asuntos. [250]
Por la fuerza, pues su padre GUILLERMO I DE INGLATERRA había dejado: -a
su hermano GUILLERMO II como rey de Inglaterra,
Así, al morir repentinamente GUILLERMO
II DE INGLATERRA, su hermano ENRIQUE I DE INGLATERRA le
sucedió en el trono de Inglaterra, y aprovechó la ocasión para quitarle a
su otro hermano, todavía vivo, el ducado de Normandía por la fuerza. [251]
Heredero de la dinastía de Anjou. [252]
Heredero de la dinastía de Normandía. [253]
En el Tratado de Wallingford, para evitar un choque total de tropas de ambas
dinastías. [254]
Y que le llevó a enfrentamientos con los barones anglosajones, y con sus
propios hijos. [255]
Con conquista que se hizo, y colonización directa en los dos últimos
casos. [256]
Mandando asesinar por ello, en 1170 y en plena catedral, a su
confesor TOMAS BECKETT, por no seguir sus ideas. [257]
Tras lo cual intentó reconquistar los territorios franceses, y esto le llevó
a la muerte. [258]
Magnum Concilium, según recoge la
terminología. [259]
Capaces de autorizar o desautorizar las contribuciones que los reyes pedían
a sus vasallos. [260] Pero sin parlamentarios representativos. |