HISPANIA
ROMANA
Conquistada el 218 a.C. por Escipión, y romanizada al completo por más de 700 años
Madrid,
1 junio 2018 Roma fue el resultado de una laberíntica política interior, y de las conquistas legionarias llevadas a cabo hacia el exterior. Una fuerza y otra, centrípeta y centrífuga, que se acoplaban y crecían a la perfección. Cuatro fueron las fases de conquista romana del mundo antiguo entero: -del Lazio (509-358 a.C), tras las victorias de Spurio Cassio sobre los latinos, de Furio Camilo sobre los etruscos, y del senado romano sobre los sabinos, volscos, ecuos y campanos, firmantes todos de las obligadas ligas con Roma y otras 29 ciudades del entorno; -de Italia (358-272 a.C), gracias a las victorias de Roma en las I, II y III Guerras Samnitas, sobre todas las colonias griegas del sur italiano y sobre las ciudades etruscas del norte, y en las que los mares Adriático y Tirrénico pasaron a ser mares romanos; -del Mediterráneo occidental (264-146 a.C), gracias a la victoria de Roma sobre la púnica Cartago en las I, II y III Guerras Púnicas, y en las que Sicilia, Córcega y Cerdeña pasaron a ser provincias romanas[1], Hispania y Lusitania pasaron a ser provincias romanas[2], Africa pasó a ser provincia romana[3], y los mares Atlántico y Mediterráneo pasaron a ser mares romanos; -del Mediterráneo oriental (196-129 a.C), tras las victorias de Roma sobre los griegos, macedonios, jonios, gálatas, sirios, armenios, persas, partos, egipcios, árabes... en las trascendentales batallas de Cinóscefalos-196 a.C[4], Pidna-168 a.C[5] y Actium-31 a.C[6], y en la que los mares Negro, Caspio, Rojo y Pérsico pasaron a ser mares romanos. No obstante, el punto de inflexión de la conquista romana del mundo se debió a su victoria sobre Cartago en las I, II y III Guerras Púnicas. Unas guerras en las que se enmarcó la conquista romana de Hispania: -porque
Hispania era el granero e invernadero de la púnica Cartago,
Así, durante el transcurso
de la II Guerra Púnica, del 218 al 201 a.C,
Roma pasó a dominar en la península Ibérica la costa mediterránea de
Gibraltar a Cataluña,
el bajo valle del Ebro y el valle del Guadalquivir, así como el borde montañoso
septentrional de Sierra Morena[7].
Del
201
al 160 a.C, Roma extendió sus conquistas al pie del Pirineo,
Navarra, Aragón, el medio valle del Ebro, el valle del Jalón, la meseta
meridional y el territorio portugués al sur del Tajo[8].
Del
153 al 133 a.C, y merced a sus victorias en las Guerras Celtibéricas
y Guerras Lusitanas, Roma conquistó también la meseta septentrional y los
territorios del noroeste al sur del río Miño. En el año 123 a.C. se
anexionaron las islas Baleares[9]. Finalmente, del 29 al 19 a.C, Augusto completó la conquista del norte peninsular, tras las victorias romanas en las Guerras Cántabras y Guerras Astures[10]. a) Conquista de Hispania Comenzó
con el desembarco de las legiones romanas en las costas españolas el año 256
a.C, como estrategia para combatir Roma a la africana Cartago en las guerras púnicas[11].
Se trataba de cortar la base de aprovisionamiento del ejército cartaginés, ya
que éste reclutaba mercenarios de Hispania para la campaña de Italia[12],
así como bases invernales y materia prima para la construcción naval. Así,
el ejército que los Escipiones trajeron a Hispania no tuvo otra finalidad que
frenar la presencia de cartagineses en la Península, así como impedir: -las
expediciones de Asdrúbal y Magón hacia Italia, En
total, invernaban en Hispania: -del
ejército cartaginés, 55 naves, 20.000 infantes y 11.000 marinos[13], El
Desembarco de
Ampurias-218 a.C. introdujo en Hispania 60 naves y 2 legiones romanas
a las órdenes de Cneo Escipión. Desde ahí, Publio Escipión seleccionó
10.000 hombres y 700 jinetes y salió a cortar el paso por la retaguardia a Aníbal,
que había atravesado los Pirineos[15]
y se dirigía hacia la llanura del Po. El
Desembarco de
Tarraco-217 a.C. introdujo en Hispania 30 naves[16],
1 legión romana[17]
y un gran acopio de provisiones[18]. Tras
deshacerse de los cartagineses, el inicio
de la conquista romana de Hispania contó con 4 legiones y el
liderazgo de: -Claudio
Nerón, que contó con 13.000 hombres en total[19], Se
trató de un ejército romano que recibió desde sus inicios mercenarios
indígenas: -celtibéricos
desde el 212 a.C, para las campañas contra los cartagineses[21],
Y así, poco a poco se fue consumando la caída
de las plazas de: -Cartago
Nova, en el 208 a.C,
Tras 30 años de continua pacificación
hispánica, los soldados romanos comenzaron a mostrar fatiga[22]
y deseo de volver a Roma el año 180 a.C[23],
y eso a pesar de que todo lo que obtenían de los saqueos era abundante y para
ellos. Pero es que suponía para ellos la campaña hispánica tener que: -convivir
con mercenarios indígenas,
Hasta que decidieron los soldados casarse con las mujeres
ibéricas, y dieron pie así a un nuevo periodo de paz de otros 30 años,
sin apenas llegada de nuevos refuerzos de Roma. Hacia
el 150 a.C. volvieron a sonar nuevas alarmas en el Senado romano, y a llegar
continuos refuerzos de Roma para las guerras
hispánicas: -la
Guerra Lusitana, que duraría del 155 al 136 a.C,
Se trató de unas guerras de fuego[24],
pues tan pronto parecían extinguirse en un lugar cuanto brotaban con mayor
fuerza en otros lugares. Y eso a pesar de la política conciliadora del delegado
especial Marcelo. En ellas participaron directamente: -el
cónsul[25], Las
principales derrotas
romanas se produjeron con: -Mumio,
cuyo ejército pretoriano perdió 9.000 de sus 15.000 efectivos, en una
emboscada del indígena Césaro,
Así como las principales victorias
romanas se produjeron con: -Fabio
Máximo, que tuvo que incorporar a su ejército consular a 17.000 reclutas
bisoños,
Del 130 al 80 a.C. gozó Hispania de un proceso de paz y romanización intensa[28].
De hecho, los mismos romanos fueron los que empezaron a hacerse la guerra, como
fue el caso de los ejércitos de Sertorio y Cayo Annio[29],
y el preludio de las guerras civiles de César y Pompeyo[30].
Hasta que en suelo hispano estallaron las guerras
civiles entre romanos[31],
entabladas[32]: -entre
el bando de Pompeyo[33],
enviado legal del Senado romano para centralizar todavía más a la autónoma
Hispania, Momento
en que empiezan a ingresar en el ejército romano los apresados[35]: -por
César, de los indígenas que reclutó en sus conquistas de Córdoba e
Hispalis, para su Guerra de las Galias, Con
la llegada a Hispania de Augusto, el año 41 a.C, tiene lugar la Guerra Cántabra, desbaratada
completamente a través de 7 legiones enviadas por el emperador a la zona[36],
de las cuales 4 decidieron hacer campamentos invernales: -la
I Alauda y VI Victrix, alrededor del Macizo Cantábrico, Los
campamentos
romanos invernaban por doquier. Destacaron los cuarteles de: -Tarraco,
plaza elegida por Escipión desde el 217 al 206 a.C. para su guarnición, y que
poco a poco se fue haciendo plaza romana fuerte en torno a la desembocadura del
Ebro, -Carteia,
donde solía invernar el cuestor Vetilio con sus ejércitos hasta el 146 a.C,
recibiendo allí los refuerzos llegados por mar desde Italia, En
cuanto a las guarniciones
romanas, éstas fueron colocadas por los generales en: -Castaca,
por Escipión el año 206 a.C,
En cuanto al reglamento
militar romano, fueron muchos los tránsfugas del ejército romano que se
escaparon de la legión y pasaron a vivir en las poblaciones indígenas. De ahí
los constantes castigos de: -corte
de manos, impuesto por Fabio Máximo el año 140 a.C, b)
Colonización de Hispania
Dejando al margen la fenicia Cádiz[37],
púnica Cartagena[38]
y griega Ampurias[39],
todas ellas de antiquísimo precedente
pre-romano[40],
se puede decir que Roma colonizó Hispania ex-novo y de principio a fin, sobre
todo en los ss. III-I a.C. Así,
todo el conglomerado de poblados indígenas, así como de factorías, puertos y
necrópolis pre-romanas... pasaron a integrarse en el inédito proceso de
urbanización llevado a cabo en Hispania por Roma, salvo alguna excepción[41]. Tarraco
fue fundada por Escipión ex-novo[42]
el 217 a.C, con muralla de moda etrusco-helenística[43]
del 200 a.C[44]
y puerta de acceso a toda la Hispania[45].
Fue el principal puerto de desembarco entre Roma e Hispania, y el lugar de
residencia del pretor de la Provincia Citerior. Itálica
fue fundada por Escipión el 206 a.C, con todos los materiales y esculturas que
Mummio había saqueado en Grecia[46].
Sirvió para asentar a los heridos de la Batalla de Ilipa, así como para alojar
en adelante a numerosas tropas italianas, muy cerca del Mar y de la Bética. Grácoris
fue fundada por Sempronio Graco el 179 a.C, como nudo fluvial de comunicaciones
entre Rioja, Tudela y Zaragoza, sobre el río Ebro. Albergó población celtibérica
junto a la colonia italiana, sujeta a derecho latino con el tiempo. Carteia
fue fundada por Canuleio[47]
el 171 a.C, sobre las maravillas costeras del estrecho de Gibraltar. Fue lugar
de retiro para los licenciados de guerra y sus esposas indígenas[48],
acumulando una población de 4.000 ciudadanos de derecho latino. Córdoba
fue fundada por Claudio Marcelo el 151 a.C[49],
como punto de control sobre Sierra Morena. Fue la colonia más recurrida de
todos los conflictos, como centro de planificación, manutención y alojamiento
que fueron haciendo sucesivamente Sertorio, Pompeyo, César y Augusto. Otras
colonias romanas fueron en Hispania: -Castra
Seruilia, fundada por Servilio Cepión el 139 a.C, como sede del pretor de
la Ulterior, Las
colonias de
Augusto, que sembraron Hispania de romanidad y multiplicaron la
población hispano-romana a los 9 millones, constituyeron la columna vertebral
del presente y futuro de España, destacando entre ellas Barcino, Emérita,
Astúrica, Ilici, Castellum, Cesaraugusta, Ebora, Tuy, Lisbiosa…[53].
En total, en el año 0 Hispania contaba con[54]: -37
ciudades con status romano,
El tipo
de colonos que llegaron a Hispania desde Roma fue predominantemente
italiano y comercial, y su goteo fue constante en todas las épocas. Pero otro
gran número procedía de otros lugares imperiales, como era el caso de las
tribus de: -sammios,
sabinos y óseos, traídos por Escipión de Italia del Sur para las guerras
púnicas, lusitana y celtibérica del s. II a.C[57], c)
Red viaria de Hispania Abarcó
realidades terrestres
y marítimas, y sirvió para conectar y civilizar los pueblos hispánicos,
aparte de agilizar el correo y legiones romanas. De hecho, allí donde no llegó
la comunicación, su civilización escaseó y el salvajismo pervivió[59]. En
efecto, los romanos se entregaron pronto, al igual que en Etruria y resto del
Imperio romano, a la tarea de construir vías, con fines
militares principalmente. Pero pronto se convirtieron en auténticas arterias
de civilización. Nada más que Augusto, fiel a su programa de
prosperidad material, se vio obligado a construir en Hispania más de 2.000 km
de vía romana. Costeó
la costa del Mediterráneo
la famosa Vía Hercúlea[60],
citada ya por Polibio con anterioridad al 124 a.C[61].
Iba “desde las columnas de Hércules hasta el Ródano”, según las
distancias de[62]: -de
Gades a Cartago Nova, 1.300 estadios, Este
fue el camino seguido por Escipión en su marcha desde Tarragona a Ilipa, cuando
en el año 208 a.C. venció a Asdrúbal[63].
La Vía Hercúlea fue recorrida en 27 días por César, cuando vino desde el Ródano
a Obulco. Esta vía estaba en función del comercio, de la explotación de las
minas de Cartago Nova y andaluzas. Por
motivos económicos, la Vía Hercúlea fue ampliada en el año 9 a.C. por
Augusto a lo largo de Sierra
Morena, siguiendo la ruta: -de
Saetabi a Cástulo y Córdoba, en el centro de la Bética, Se
trata de una Vía por la que huyó Pompeyo de Córdoba a Cartago, al final de la
guerra civil y el desastre de Muda ante el ejército de César. Entre los
Pirineos y Tarragona se
han hallado miliarios procedentes de[64]: -Mario
Sergio, procónsul de la Hispania Citerior del 120 a.C, Entre los
Pirineos y el Cantábrico
se situaba una vía de 2.400 estadios que partía de Tarragona e iba a Pamplona
y Oyarzun, ciudad limítrofe entre Aquitania e Iberia. Una
vía militar conectaba el Guadiana
con Sierra de Gredos[65],
por obra de: -Cecilio
Metelo, que el 139 a.C. la inició, En
torno a la Lusitania,
y para obtener el estaño de la zona, fue construida por Metelo la Vía de la
Plata[66],
que iba de Metellinum hasta Vicus
Caecilius, y que Augusto prolongaría hasta Salamanca y Caesaraugusta. En
la zona minera
fue construida por Augusto la Vía Astúrica-Emérita[67],
junto a sus ramales: -de
Segisama a Portus Blendius, d)
Civilización de Hispania Fue
fomentada de
arriba abajo, y más enérgicamente que en ninguna otra provincia del
Imperio romano. Provocó que casi toda España asimilara rápidamente los usos y
civilización romana, y que hasta se latinizara antes que las demás provincias
transmarítimas. Fue
debida a[68]: -la
presencia del ejército romano en la Península, A
estas causas
habría que añadir: -el
comercio, Algunas
de estas causas, como la construcción de vías y uso del latín, son más efectos
y causas de la romanización, pero contribuyeron a su vez a extender la
romanización. Se
trató de un proceso
dinámico y no estático sino dinámico, que hubo de realizarse a lo
largo del Imperio e incluso después de su caída. Comenzó
a ser patente en una serie de signos
exteriores, como el vivir a la manera romana y el olvidar el idioma
propio, a lo que seguirá el obtener el derecho y ciudadanía romana, así como: -la
plena posesión del status jurídico romano, e)
Latinización de Hispania Comenzó
a ser una realidad hablada en
el seno de las tropas indígenas que sirvieron en los ejércitos
romanos, pues allí tuvieron que aprenderlo cuanto antes para poder comunicarse
con sus nuevos amos. Yugurta fue el primer caso hispano que habló latín[69],
tras haberlo aprendido en el campamento romano que asedió Numancia. En
el 127 a.C. algunos numantinos
hablaban y escribían latín, pues después de la derrota ante Mancino: -sostuvieron
una conversación con Graco, La
Bética fue el primer lugar donde comenzó a ser hablado el latín de forma continua, como se
desprende del latín arcaico que fue utilizado en las Inscripciones de Cástulo[71]. Muchos
caracteres
latinos empezaron a extenderse por[72]: -Cartago
Nova, llena de inscripciones llegadas de fuera, Hacia
el 80 a.C. el latín era hablado de
forma habitual en: -Hispalis,
Córdoba y Tarraco, donde se celebraban asambleas de hispanos con los
generales romanos, sin necesidad de intérpretes, El 45 a.C. desaparece prácticamente el bilingüismo y Roma implanta el latín como idioma oficial de Hispania. f)
Política de España romana Tras
la Conquista de Cádiz-206 a.C, y expulsión definitiva de todos los
cartagineses[74],
el Senado romano decide enviar a Hispania tantos magistrados
como hiciese falta, para gobernar a los indígenas y mantenerlos en paz. En
el 205 a.C. Hispania es dividida en 2 provincias[75],
y en el 197 a.C. llegan a las mismas los primeros pretores[76]: -capacitados
para negociar,
Cartago Nova y Tarraco fueron las sedes alternas
del prefecto, encargado de dictar
justicia y recorrer para ello toda la Hispania al completo. En
el 195 a.C, y tras el aniquilamiento indígena del pretor Sempronio Tuditano, el
Senado romano aprueba el nombramiento para Hispania de 1 cónsul[77]: -capacitado
para licenciar,
Para las circunstancias extraordinarias de
conflicto el Senado romano se guardó la
capacidad de: -prorrogar
o no los mandatos anuales de cada cargo hispánico[79],
Con la llegada
de Augusto,
las provincias hispanas pasaron a ser 4[82],
y quedaron repartidas desde el 27 a.C: -para
el emperador, la Tarraconense y Lusitania[83],
Así, mismo, deja de recaer toda la justicia en un
mismo prefecto, y pasan a ser designadas como conventus
de justicia[84],
al mando de un magistrado: -en
la Tarraconense, las sedes de Tarraco, Cesaraugusta, Astúrica y Brácara,
El cometido principal de los gobernadores
locales era gobernar a romanos e indígenas: -defendiéndolos
de los saqueadores[85],
En cuanto al pago de impuestos: -los
pretores fijaban el precio y tasaciones de los productos, Caben
destacar las comitivas
especiales que de Roma desembarcaron en Hispania en: -el
210 a.C, en que una comitiva de Escipión llega por mar desde Puteoli, g)
Economía de España romana Hispania
fue una colonia de Roma en continua
explotación, y en ella se volcó desde los primeros siglos debido a
su extraordinaria riqueza. La
compra-venta de
esclavos fue la 1ª actividad comercial desarrollada en Hispania,
como se ve en: -el
212 a.C, en que Escipión conquista Sagunto y lleva a los turboletas a Roma, En
otras ciudades se compraban esclavos indígenas para la clientela local[97],
como se ve en los casos consentidos de: -esclavos
celtibéricos sirviendo en las ciudades de Cissa y Salamanca, La
actividad
comercial fue floreciente desde los inicios, y provocó un fuerte
intercambio de influencia y beneficios. De hecho, el comercio fue el principal
factor de romanización de Hispania[99],
ya que a través de los productos comerciales podían penetrar las modas, formas
de vida, costumbres y cambio de mentalidad. Augusto marcó el momento cumbre del
comercio hispano, una vez que pudo extirpar totalmente la piratería, y la
navegación se hizo totalmente segura[100]. Los
mercaderes
dedicados al comercio debieron ser muy numerosos desde el primer momento, ya que
Hispania era “el dorado de Occidente”[101].
Pero mención especial recibieron los mercaderes del s. II a.C. de: -Cissa,
en cuyo botín de conquista figuran relaciones marítimas y terrestres, Las
relaciones marítimas
Hispania-Italia fueron primordiales y continuas, sobre todo hasta el 153 a.C (en
que el transporte terrestre entre ambas fue equiparable al marítimo[102],
salvo el de correo[103]).
De hecho, el año 160 a.C. Servilio Cepión tuvo que crear la Turris Caepionis,
para que los buques evitasen el banco de Salmedina en la desembocadura del
Guadalquivir. Esto
favoreció el desarrollo de compañías
navieras especializadas, que traían provisiones desde Ostia y
Puteoli (del 200 al 100 a.C) y Sicilia (tras las matanzas sertorianas del 73 a.C),
sobre todo para las legiones. Cabe
destacar los núcleos
comerciales de: -Turdetania,
la provincia con mayor número de barcos comerciales con Italia[104], Pero
el principal recurso económico de Hispania consistió en la explotación minera, que Roma
desarrolló desesperadamente en: -las
Minas de Cástulo, que desde el 206 a.C. aportaron a Roma los pozos llenos
de plata abiertos por Aníbal, En cuanto a la emisión de monedas, fueron permitidos los viejos privilegios de Cádiz[108] y Ampurias[109] y nada más[110], se usó la plata y el bronce[111], se impuso como obligatorio el latín[112] y la estampa del magistrado del momento y lugar[113], y fueron aprobadas 17 nuevas cecas[114] acuñadoras de moneda.
El concepto de Romanización
fue algo que comenzó al mismo tiempo que la conquista peninsular por parte de
Roma, terminó exactamente el último día de su presencia conquistadora en
Hispania, y no fue en todos los lugares o momentos igual. -inicial
gradualidad,
En este proceso
temporal, las regiones conquistadas con más anterioridad se
romanizaron antes y de manera más profunda que las que fueron conquistadas más
tarde[115].
Pero también hubo excepciones, o casos de no romanización, en enclaves
temporalmente “romanizados”.
Muchos lugares y sociedades
locales guardaron, pues, distintos grados de romanización, según su posición
geográfica, temporal o estratégica, a los planes colonizadores de
Roma.
Pero los auténticos
elementos de juicio para analizar la romanización de la península Ibérica son
los aportados por Blázquez y Plácido: el económico y el político.
En efecto, fue la necesidad
de explotación económica la que llevó a
Roma a la creación de rutas o vías de comunicación, colonias itálicas y
concesión del derecho de ciudadanía latino, implantación de destacamentos
legionarios… e incluso la asimilación de tradiciones indígenas. La economía
fue el auténtico móvil de operaciones de la República e Imperio romano[116].
Y junto al móvil económico,
el móvil político, esa política global de
ecumene romana que absorbía pueblos y
provincias. En este sentido, y como apunta el profesor Bravo, ya en el comienzo
de la época imperial Augusto no configuró el nuevo orbe romano como un simple
conglomerado de provincias, sino como un sistema centralizado de poder: -militar,
religioso, judicial y legislativo, en la persona del emperador, h.2) Romanización económica
Tuvo lugar a
través de una serie
de mecanismos, implantados ex profeso en Hispania por Roma, y
que actuaron en adelante por sí mismos. Fue el motor del resto de
romanizaciones en la península Ibérica.
Es el punto de vista de J.
M. Blázquez, para el que Roma se volcó en la Península con el único fin de
la explotación
de sus riquezas.
Roma ofrecía a Hispania, a
cambio, ventajas
de todo tipo: -envío
continuo y estratégico de tropas,
A cambio, Hispania recibía
de Roma el inconveniente
de ser explotada económicamente.
Tuvo lugar a
través de la política romana de la ecumene,
según apunta el profesor Plácido, y como sistema aplicado por Roma para
integrar la multiplicidad de pueblos y personas de toda la Hispania al completo.
En ese sentido, la ecumene fue, según
Plácido, la universalización que hizo Roma de la contingencia, de la
diversidad y del caos, realizada en Hispania a través de múltiples dinámicas.
En la época republicana, la
diversidad
de Hispania fue integrada en la lógica interna del sistema esclavista de Roma,
que tenía necesidad de que existiera diversidad para imponer sobre ella su
hegemonía. La romanización política consistió, pues, en una composición
heterogénea, en la que la unidad vino definida por la implantación de la hegemonía.
Fue la implantación que hizo Roma en Hispania de una realidad desigual.
En paralelo, se estableció
el control
ideológico.
En la época
alto-imperial, la construcción del limes-frontera
imperial cambió los métodos ecuménicos romanos en Hispania. Dos fueron las
intenciones del limes: -la
marginalidad, siguiendo a Estrabón, al referirse a las provincias
imperiales,
En este sentido, la romanización política imperial se pareció a la imagen de
la chora, con un centro poderoso y
espacios limítrofes marginales.
La Roma imperial fue una entidad
incluyente. De ahí la importancia de lo griego como ideología ecuménica,
y la exclusión de todo lo que fuese bárbaro.
En la época bajo-imperial,
el proceso de pérdida de libertad comenzó a
ser percibido en Hispania desde la época de los Antoninos. Así, tuvo lugar la
introducción de factores contrarios a lo que fue la ecumene romana, republicana o imperial. La integración de cristianos y bárbaros, como protagonistas de la decadencia en lo positivo y en lo negativo, fue el espíritu de la romanización tardo-imperial.
El hibridismo
cultural hispano-romano alcanzó todas las escalas. Así, en una ciudad de la Bética,
una persona podía vestir toga romana, comer a la manera turdetana, orar según
la tradición púnica, y enterrar a sus muertos según ritos concluyentes.
La
romanización trajo consigo a Hispania un marco de nuevos
modelos culturales
romanos: sus hábitos, costumbres, gustos artísticos, creencias religiosas.
No
obstante, la sentencia de Estrabón de que “falta poco para que todos se hagan
romanos” estaría aludiendo más bien a categorías
jurídicas que culturales. Eso sí, las lenguas vernáculas hispanas
fue uno de los factores que quedaron rápidamente olvidados, tras una larga
etapa de bilingüismo.
La interacción cultural indígena-romana trajo consigo fenómenos de
convergencia y validación
de antiguas
tradiciones, a lo largo de un gran periodo de tiempo.
Los ingredientes prerromanos
diluyeron su indígena identidad en la identidad romana, a juicio del profesor
Bendala, como unas “legumbres”[118]
que introdujésemos en una “batidora” y que, tras su acción, quedaran
subsumidas todas en una pasta
homogénea.
En este símil, el nuevo
plato indígena-romano: -era
degustable sin poder separar los ingredientes,
Cabe ver que la menestra fue
cambiando de color
dominante, según iban desapareciendo los componentes indígenas
previos y se incorporaban los nuevos componentes romanos (madurez republicana,
inmigración itálica…). h.5) Romanización social
Es verdad que en la Bética
y en contadas excepciones, la batidora romana
descrita por Bendala integró “legumbres” indígenas junto con las romanas.
Pero generalizar tres o más
casos particulares[119]
a regla general, en el espacio de casi 500.000 km2 y a lo largo de 6 siglos de
historia, parece algo bastante poco probable.
Es verdad que hubo focos
locales que no fueron romanizados del todo, que “escaparon” a
cierto grado de romanización[120],
y que el interés prioritario de Roma en Hispania[121]
fue principalmente económico, y de ahí
todo lo demás. Las excepciones, pues, sólo pueden circunscribirse a ciertos focos locales, que: -no
escaparon a la romanización,
No obstante, estas excepciones tampoco presentaron proceso
de continuidad ni paralelismo alguno con otras parecidas[122].
Roma fue ante todo una
potencia militar, y el calendario legionario
marcaba el día a día de Roma en Hispania[123].
Así, la anexión de
Hispania como provincia romana fue igual a la del resto
de provincias, aunque tuviese alguna particularidad. Fue, ante todo,
una anexión militar, con procónsul, pretor, autoridad civil senatorial y ecónomo
imperial a su servicio.
Destacaremos 4 momentos
importantes en esta romanización militar de Hispania.
El primero, ocurrido en los
años 218-206 a.C, tuvo por exponente a Escipión, que en el transcurso de la II
Guerra Púnica desembarcaba en Ampurias-218 a.C[124]
y conquistaba Cartagena, Bailén y Cádiz-206
a.C, fundando además la colonia de Itálica para preparar a los soldados para
la Batalla de Zama-202 a.C. A su vuelta de Africa, el general romano dejaba en
Hispania el primer contingente de itálicos, los soldados heridos que no tenían
fuerzas para regresar a Italia[125].
El año 171 a.C. el Senado
romano decide crear la colonia de Carteya para los hijos de soldados romanos,
casados con mujeres hispanas.
En el 138 a.C. Junio Bruto funda la colonia de Valentia con los veteranos del ejército,
combatientes de las Guerras Lusitanas.
En el 123 a.C. Cecilio Metelo crea las colonias de Palma y Pollensa, con 3.000
romanos oriundos de la península.
Así, toda la Hispania fue
paulatinamente militarizándose, casando a matrimonios
mixtos de soldados romanos con indígenas y romanizando por la vía
militar las estructuras familiares, urbanas y sociales. h.7)
El caso del norte de España
Según el
profesor Vigil, una de las causas de la escasa o “aparente” romanización
del norte peninsular fue el bajo
nivel cultural y
económico, encontrado por los romanos cuando llegaron y lo
conquistaron. Pero estudiemos el caso mediante un ejemplo: la ritual Inscripción de Erudino-399 d.C, dedicada al dios indígena Erudino en Pico de Dobra-Torrelavega, y perteneciente al final de la estancia romana en Hispania.
En efecto, en la Inscripción
de Erudino nos encontramos con: -dedicación
a un dios indígena,
Luego: -el
cristianismo todavía no había impregnado el norte de España,
Analizando la epigrafía
completa del dedicante de la inscripción anterior, nos encontramos con que su
nombre era Cornelius: -del
vico de los Aunigainos,
Luego el simple empleo de
nombres romanos no era prueba segura de romanización, y sí de un modo distinto de romanización
que sufrió el norte hispano, en comparación con el resto peninsular.
Esta “aparente” o escasa
romanización del norte peninsular quedó también al descubierto en la utilización
de nombres norteños en la Alta
Edad Media, con estructuras indígenas y no con estructuras romanas.
En efecto, fueron estructuras
indígenas bajo-imperiales (y alto-medievales): -poner
el nombre propio (poner el nombre propio),
Podemos concluir, con el profesor Vigil, que Roma contribuyó a romper
toda organización tribal del norte de España. Cada región del norte siguió diferentes ritmos en este proceso de romanización, y el País Vasco fue con mucho el más lento. Madrid,
1 junio 2018 [1]
En la I
Guerra Púnica, del 264 al 241 a.C. [2]
En la II Guerra Púnica, del 219 al 201 a.C. [3] En la III Guerra Púnica, del 149 al 146 a.C. [4] Donde Siria pasó a control de Roma. [5]
Donde Macedonia pasó a control de Roma. [6] Donde Egipto pasó a control de Roma. [7] 1ª fase de conquista romana en la península Ibérica. [8] 2ª fase de conquista romana peninsular. Según algunos autores, el suroeste peninsular portugués debe incluirse en la siguiente fase ocupacional, tras las Guerras Lusitanas-147 a.C de Roma contra Viriato, que se alargaron hasta el 139 a.C. [9]
3ª
fase y más importante, de la conquista romana peninsular. [10] 4ª fase y última, de la conquista romana de la península Ibérica. [11]
Siendo los cónsules MANLIO VULSON y ATILIO REGULO los primeros romanos en
pisar suelo español, en una campaña del 256 a.C. en la que trasladaron
40.000 infantes al Africa cartaginesa, a través del litoral español. [12]
Como bien manifestó ASDRUBAL, al aludir al “espíritu de caudillaje de la
clientela hispánica”, cuando fue proclamado en Cástulo como general de
todos los ibéricos, con plenos poderes de actuación. [13]
Un 50%
del ejército de reserva cartaginés (compuesto en total por 102 naves,
46.000 infantes y 22.000 marinos). [14]
Un 33%
del ejército operativo romano (compuesto por idénticos números que en sus
operaciones de Sicilia y Cerdeña, y un total de 150 naves, 30.000 infantes
y 3.000 jinetes). [15]
Con 80.000 infantes y 12.000 jinetes cartagineses. [16]
Según datos de TITO LIVIO. [17]
Según datos de VALERIO MAXIMO,
que alude a que en ese momento las fuerzas de Roma se encontraban agotadas
(lo mismo que repite PARETI, que cifra en 8.000 el número de hombres
totales llegados, incluyendo todos los estamentos de la tripulación). [18]
Según datos de POLIBIO. [19]
Según BOSCH GIMPERA. [20]
Según datos de POLIBIO. [21]
A lo largo de toda la costa ibérica,
hasta que este contingente de 120 soldados celtibéricos desaparezca al
completo en la derrota de Cástulo-211 a.C. [22]
Pues el servicio militar abarcaba
un contrato de 6 años seguidos, incluyendo veranos e inviernos. [23]
De hecho, a la muerte del último ESCIPION ningún hispanista se presentó a
general, e incluso los romanistas CORNELIO y LICINIO CRASO pusieron excusas
para no venir a Hispania. [24]
Según POLIBIO. [25]
Cargo que fueron ocupando sucesivamente: -NOBILIOR,
que logró reclutar otros 20.000 hombres en el 153 a.C, [26]
De 5.000 soldados cada una, sin selección previa y por sorteo, [27]
Según SCHULTEN. [28]
De hecho, el ejército consular de SERTORIO no llegaba en el 80 a.C. a los
2.700 soldados romanos y 700 auxiliares libios. [29]
Episodio que cuenta PLUTARCO. Pues
SILA había aprobado por su cuenta la entrada en Hispania de su delegado
CAYO ANNIO, al mano de 1 legión de 5.000 soldados. Tras lo cual, y una vez
que atravesó los Pirineos, SERTORIO le salió al encuentro con 3.000
soldados, y logró vencerlo en el 79 a.C. [30]
Que en el caso de Hispania
obedecieron a un doble movimiento: -de
POMPEYO, que fue enviado desde Roma para intentar controlar más de
cerca a la lejana Hispania, apoyando la línea abierta por SILA (que había
ido enviando con anterioridad y estrepitosamente a CAYO ANNIO, AQUINO y
METELO); [31]
Todas ellas con la presencia en suelo hispano de los mejores generales de
que disponía Roma, según relata CICERON. [32]
Hasta la decisiva Batalla de Munda, en que las 9 legiones de CESAR
destrozaron a las 6 legiones supervivientes de POMPEYO, e Hispania quedó a
merced del nuevo líder romano, camino desde entonces del Rubicón-Roma. [33]
Integrado por las legiones de: -CAYO
ANNIO, llegado de la Galia el 82 a.C, [34]
Integrado por las legiones de: -JULIO
SALINATOR, que destrozó a Annio el 81 a.C, y se quedó a vigilar las
entradas por los Pirineos, [35]
Pues el derecho de guerra romano autorizaba a vender los prisioneros. [36]
La I Augusta, la II
Augusta, la IV Macedónica, la I Alauda, la VI Victrix, la IX Hispania y la
X Gemina. [37]
Auténtico emporio de comercio marítimo y nº 1 en relaciones con Africa y
el Atlántico, que aportó a los colonos romanos sus viejos hornos de
vasijas y elaborado del garum
(para ser distribuido desde allí a todo el Imperio romano). [38]
Mejor puerto de todo el Levante, y nº 1 en intercambio de mercancías con el exterior, que aportó
a Roma sus ricas minas de plata de 40.000 obreros diarios y rentabilización
al pueblo romano de 25.000 dracmas diarias. [39]
Verdadera joya de la civilización helénica, que aportó a los romanos
llegados de Italia sus estupendas estructuras urbanísticas, como templos,
teatros, stoas, esculturas,
pavimentado… así como su perfecta organización social. [40]
cf. mercaba.es/enciclopediadehistoria/españa_prerromana.htm [41]
Como fue el caso de Cástulo-Linares, las minas de La Unión, los templos de
Rodas… [42]
Y no sobre un antiguo
asentamiento etrusco, como bien ha demostrado ALMAGRO. [43]
Muy parecida a la de Perugia.
Y es que en esta época helenística Roma continuaba con la moda etrusca de
adornar las puertas de las ciudades con cabezas ornamentales (aunque con
cierto carácter apotropaico, como se venía imponiendo desde la Puerta de
Volterra). [44]
Pues las recientes catas efectuadas en el material de relleno de las
murallas han proporcionado fragmentos de Campaniense B, que dan una cronología
alrededor del año 200 a.C. Fecha que también está confirmada por la
cabeza de la Torre San Magín de
Tarragona. [45]
Como quedó patente en su Puerta Principal, con 2 cabezas que posiblemente
representaban a las puertas del Hades y al difunto delante de ellas,
simbología de que Tarraco, a pesar de ser un puerto malo, era la gran
cabeza-puente de la conquista romana en Hispania. [46]
Según GARCIA BELLIDO. [47]
Pretor de la Hispania Ulterior. [48]
Por petición expresa de los
propios licenciados, que pidieron al Senado romano la fundación de una
colonia, con esas cualidades, para su nueva situación. [49]
Según SCHULTEN, pues su fecha de
nacimiento es todavía muy discutida por THOUVENOT, BLEYE y BOSCH-GIMPERA. [50]
Hasta que el año 94 a.C. decidió
destruirla completamente el cónsul DIDIO. [51]
En cuyos dominios (entre Mérida
y Toledo) han sido descubiertos numerosos documentos alertando de una
repentina llegada de religiosos orientales. [52]
Lo que acabó convirtiéndose en
un gran foco de romanización de los vascones. [53]
Así como Acci, Asido, Astigi, Traducta, Tingis, Tucci, Norba, Salaria,
Scallabis, Pax Iulia, Virtus
Iulia, Castra Iulia, Castra Vinaria, Castra Gemina, Vicus Augustus, Pagus
Augusti, Aqua Augusta… [54]
Según datos de ESTRABON. [55]
Sobre todo en la Hispania
Citerior y la Bética, mucho más desarrolladas que el resto. [56]
Sobre las regiones lucense,
cluniense, bracarense, asturicense… [57]
Según MENENDEZ PIDAL, que sigue
la línea de BERTOLDI y BADDINGER. [58]
Según ROSTOVTZEFF, que cifra en 80.000 el número de estos moradores, casi
todos prisioneros de la Guerra de Mitridates. [59]
Como fue el caso del norte de Hispania, del que ESTRABON dice que “su
rudeza y salvajismo no se debe sólo a sus costumbres guerreras, sino también
a su alejamiento. Pues los caminos marítimos y terrestres que conducen a
estas tierras son largos, y esta dificultad de comunicación les ha hecho
perder toda sociabilidad y toda humanidad”. [60]
ESTRABON describe minuciosamente esta Vía Hercúlea, y anota todas las
rectificaciones sufridas sobre el antiguo trazado. [61]
Año en el que, según POLIBIO, los romanos terminaban de medir el último
tramo de la vía y empezaban a colocar miliarios sobre ella. [62]
Según las distancias entre las diferentes estaciones de la vía que va
citando POLIBIO. [63]
Según sospechas de SANCHEZ ALBORNOZ, sobre las alusiones que hace TITO
LIVIO al respecto. [64]
Según MOMMSEN, entre los Pirineos y Tarragona se han hallado miliarios
“como en ninguna otra provincia occidental de la República romana. [65]
Según las conclusiones a las que llega SCHULTEN, derivadas de la existencia
de Castra Seruilia y Vicus Caecilius (estación más avanzada de la Sierra
de Gredos). [66]
Siguiendo la ruta de los antiguos caminos tartésicos, como bien ha visto
GARCIA BELLIDO. [67]
En la que han aparecido cuantiosas pinturas pompeyanas, posiblemente porque
ya antes de AUGUSTO se habían comenzado obras de pavimentación. [68]
Según PARETI. [69]
Si exceptuamos el enigmático caso del 171 a.C, en que dos legados
provinciales (hispanos según SANCHEZ ALBORNOZ, pero sin datos contrastados)
fueron enviados por los indígenas al Senado romano, para quejarse en latín
de la conducta de los magistrados romanos en Hispania. [70]
Según relata APIANO. [71]
Estudiadas y publicadas por GOMEZ
MORENO. [72]
Como lo prueban los caracteres latinos impresos por los indígenas hispanos
en: -las
Inscripciones de Peñalba de Villastar, Cogul, Lamas de Moledo y Cabeço das
Fraguas, [73]
Según cuenta ESTRABON. [74]
Con aniquilamiento de ciudades
enteras (como fue el caso de Astapa, Alce…) [75]
Hispania Citerior (Levante y Bética) e Hispania Ulterior (Lusitania y Cantábrico). [76]
Llamados CORNELIO LENTULO y MANLIO ACIDINO. [77]
Que pasó a ser CATON. [78]
Que en ese momento eran FABIO BUTEO y MINUCIO TERMO. [79]
A veces hasta los 5-6 años de
duración (como ocurrió con LENTULO y ACIDINIO). [80]
Sobre todo para los casos de
guerra (como ocurrió con CETEGO, BLASIO y ESTERTINIO, a petición de los
ESCIPIONES). [81]
Como fue el caso de: -CATON
en el 195 a.C, para supervisar el proceso, [82]
Tarraconense, Cartaginense, Bética
y Lusitania. [83]
Cada una cuales pasaron a ser
administradas por AUGUSTO a través de 2 legados personales: -1
pretoriano y 1 consular, [84]
En los cuales el magistrado de
justicia dictaba sentencia bajo “permisu Caesaris Angusti”. [85]
Como fue el caso de: -los
cuneos y blastofenicios, defendidos en la Lusitania por los romanos
frente al bandido Púnico y sus
secuaces, [86]
Sobre todo entre: -los
soldados, que acababan su servicio militar, o se casaban con indígenas,
o cuyos hijos mixtos pedían su derecho a tierras; -los
indígenas colaboradores, que fueron siempre bien tratados (como fue el
caso de los caudillos ibéricos MOERICO y BELLIGENO, que ayudaron a MARCELO
en el 212 a.C. y recibieron un generoso número de yugadas; o como fue el
caso de los reyes turdetanos ATTENES y EDECON, que ofrecieron sus servicios
a ESCIPION en el 209 a.C; o como fue el caso del rey CULCHAS, que entregó
sus 28 ciudades y 3.500 hombres a ESCIPION en el 206 a.C); -los
indígenas conquistados, siempre asentados en las afueras de la urbe, en
los llanos y no montañas (como hizo DIDIO con los habitantes de Termancia,
obligándolos a trasladar su ciudad a un llano; o como hizo POMPEYO con los
vascones, obligándolos a bajar de los picachos pirenáicos y estableciéndolos
en la nueva Conuenae; o como hizo CESAR en la Sierra de la Estrella, donde
expulsó a todos los indígenas de Mons Herminius para evitar su bandidaje),
nunca en zonas fértiles, o en poblados para el caso (como hizo EMILIO PAULO
en el 189 a.C. en Hasta, al decretar que todos los conquistados habitaran
juntos en Torre Lascutana; o como hizo MARCO MARIO el año 102 a.C. en las
afueras de Colenda, para asentar celtíberos). De todas formas, la concesión de
tierras fue suficiente por parte de Roma, “para evitar que la necesidad no
impulsara a nadie al bandidaje” (como pidió CEPION al Senado romano el año
139 a.C, refiriéndose a los soldados del ejército de TARTALO). [87]
Como tuvieron que hacer: -CRASO,
que en el 96 a.C. prohibió a los bletonenses sacrificar seres humanos a los
dioses, [88]
Como fueron los casos de: -SEMPRONIO
GRACO, que en el 152 a.C. envió una embajada de arévacos al Senado romano,
solicitando la paz, [89]
Bajo organismos administrativos primarios, y dependencia de la administración
provincial. [90]
Que también se permitió, bajo forma de entidades constitutivas del propio
pueblo. [91]
Como fue el caso de las
gentilidades familiares respetadas de los pelendones,
carpetanos, vetones, cántabros y astures… y otras 193 a lo largo de toda
la Península. [92]
En un total de 19 centurias, según
RODRIGUEZ ADRADOS. [93]
Sobre todo con las capas del 5%
de las cosechas de trigo, aparte del 10%
de las cosechas de cereales y grandes cantidades de sal. Lo que supuso que
en algunas ocasiones, como en el trigo reclutado el 203 a.C. para las
Guerras Púnicas, se provocase un auténtico superávit en Roma y la
subsiguiente bajada de precios. [94]
Sobre todo de plata, hierro, joyas y oro. Lo que provocó la implantación
de un tribunal jurado especial que hizo el Senado romano en el 171 a.C. para
juzgar los excesos en Hispania, cometidos sobre todo por: -TITINIO,
pretor de la Citerior (170-166 a.C), [95]
Como fue el caso de la entrega a
Roma de sagos (para proteger al ejército
del frío), togas y túnicas, etc. [96]
Como fue el caso general del año
179 a.C, que GRACO impuso a toda Hispania el pago de 2.400.000
sestercios. O
como fueron los casos particulares de: -SEMPRONIO
GRACO, que en el 154 a.C. impuso un tributo brutal a los habitantes de
Segeda, [97]
Y es que, como decía PLINIO, “el esclavo hispano era muy valorado”. [98]
Según JUSTINO. [99]
Según señaló el propio CESAR, al referirse a los pueblos de Galia y de
Germania. [100]
Sobre todo por la calidad de la madera del barco, que fue mejorando a medida
que los nativos de un país fueron encargándose de su construcción. Así
como también favoreció la navegación segura: -la
mejora en la navegabilidad de los ríos, [101]
Como bien escribe PIGANIOL. [102]
Como se ve en los viajes que a Hispania hicieron: -CAYO
ANNIO, por tierra en el 82 a.C, [103]
Sobre todo de Hispania a Italia, en que todo el correo fue enviado por mar
hasta el 43 a.C, por miedo al bandidaje terrestre existente (sobre todo en
Sierra Morena).
Aunque a veces también existió bandidaje marítimo,
sobre todo hasta el 202 a.C (como ocurrió en las naves de Ostia-Tarraco del
año 217 a.C, casi todas apresadas por la flota cartaginesa). [104]
Como dice ESTRABON, “la excelencia de las exportaciones de Turdetania
queda manifiesta en el gran número y el gran tamaño de las naves… Los
mayores navíos de carga que arriban en Dicaiarcceia y Ostia proceden de aquí
(Turdetania), y su número es casi igual al que viene de Libye”. [105]
Según testimonia el propio
ESTRABON. [106]
De hecho, las proas de los barcos gaditanos estaban confeccionadas de forma
diferente a las del resto, para que al llegar al puerto alejandrino fuesen
distinguidas de las demás. [107]
Prisioneros de guerra capturados
en el Norte, según nos cuenta POLIBIO. [108]
Que pudo seguir emitiendo moneda
bajo el logotipo fenicio (salvo los nuevos sestercios, que debía
imprimirlos bajo las leyendas de AUGUSTO y GADES). [109]
Que pudo seguir emitiendo moneda bajo el logotipo griego e ibérico (salvo
los nuevos sestercios, que debía imprimirlos bajo las leyendas de AUGUSTO y
AMPURIAS). Y es que la moneda ampuritana era la más antigua en acuñar
caracteres ibéricos de Hispania, desde el año 250 a.C. [110]
Suprimiéndose la emisión de moneda: -de
Sagunto, que tuvo que abandonar sus trióbulos
y calcos griegos, en pro de los
logotipos de Tarento; [111]
Siendo estas 2 monedas las primeras en acuñarse fuera de Roma. [112]
Junto a la lengua indígena hasta el 45 a.C, y solamente en latín desde ese
año en adelante. [113]
Aunque se permitió imprimir ciertos caracteres ibéricos, pero siempre bajo
la autoridad y metrología romana. [114]
Las de Segóbriga, Bilbilis, Osca, Calagurris, Celsa, Ilerda, Turiaso,
Ercavica, Cartago Nova, Caesaraugusta, Ilici, Acci, Tarraco, Iulia Romula,
Itálica y Ebora. [115]
Es interesante, pues, todo el análisis realizado por VIGIL en torno a las
inscripciones rituales indígenas del mundo cántabro, y al alto grado de
“ausencia” romanizadora en toda la vertiente norteña peninsular. Pero las
razones son obvias. Pues los pueblos del norte fueron los últimos en ser
conquistados por los romanos (ya se había intentado en 138-132 a.C sin éxito),
y nadie antes lo había logrado. De hecho, hasta 7 legiones tuvieron que ser
movilizadas para ello, hasta que el 25 a.C. Roma alcanzara la victoria.
Otro
elemento es interesante en el análisis del profesor VIGIL. El año 23 a.C, el
100%
de astures y cántabros fueron vendidos como esclavos a Aquitania, o
aniquilados. AGRIPA degolló a todos los hombres con edad de llevar armas, y
vendió como esclavos a los ancianos, niños y mujeres. A otros pueblos los
obligó a abandonar las montañas y establecerse en los valles, para poder ser
vigilados más estrechamente. ESTRABON, OVIDIO, VIRGILIO, PLINIO y OROSIO no
pararán de recordar esta situación política del área norte peninsular. No es extraño, pues, cierta repulsa hacia lo romano en aquellas gentes, o como dice Marcelo VIGIL, que “esos grupos menores, rotos por los romanos, fueran posteriormente identificándose con el territorio ocupado, sin perder la noción de su origen y de su unidad de sangre”. [116] En época imperial, las reformas económicas fueron n-ésimas, destacando sobre todo las de DIOCLECIANO y CONSTANTINO ante el grave peligro que suponía, políticamente para la península itálica y militarmente para el sostenimiento de las legiones, un decaimiento o devaluación de cualquier tipo de resorte económico, como la moneda, sistema de alimenta, prestamos a jóvenes, subsidios familiares… De hecho, la causa económica será una de los graves detonantes de la caída del Imperio romano. [117] cf. BRAVO, G; Historia de la Roma Antigua, ed. Alianza, Madrid 2008, p. 67. [118]
Pone como ejemplo BENDALA. [119] Existen, por supuesto, muchos más casos de indigenismo en la época romana en Hispania. En la Bética, y según PRESEDO, una aristócrata de Guadiaro-Cádiz adornaba una estatua de Diana con adornos semitas. Pero no dejan de ser elementos puntuales o aislados. [120]
Muestren elementos indígenas o no. [121]
Como decía BLAZQUEZ. [122] Lo que no quita generalizar que eso ocurrió. [123] El mes de Marzo (o de Marte, dios de la guerra) primero, y el mes de Ianuarus (o de Juno, cuyo templo quedaba abierto en tiempos de guerra) después, significaban el comienzo de todas las campañas militares, el inicio del curso militar. [124]
El ejército romano expedicionario que desembarcó en Ampurias, según datos
de BLAZQUEZ, fue de 60 naves y 10.000 hombres. [125] A ESCIPION se debe la creación de Itálica, en el año 206 a.C., para asentar los heridos del ejército romano de la Batalla de Ilipa, ciudad que puso en manos de Escipión toda la Baja Andalucía y le abrió el camino a Cádiz. |