INSCRIPCIÓN TETI DE SAQQARA
Relato I de la Creación

Los dioses que se manifestaron como Ptah[1] fueron: Ptah el Grande y sobre su gran trono; Ptah-Num, el padre que engendró a Atum; y Ptah-Nunet, la madre que dio a luz a Atum. Atum es la forma en apariencia de Ptah. 

Ptah el Grande es Aquél que se manifestó con su corazón y con su palabra, quien dio la vida a todos los dioses así como a sus ka[2], gracias a su corazón (del que Horus es la emanación) y gracias a su lengua (de la que Thot es la emanación), nacidos ambos de Ptah.

Ptah dio a luz a la enéada[3], y es el corazón y la palabra de la enéada, y la enéada está ante él como sus dientes y labios, como su semen y sus manos. Porque la enéada vino a la existencia gracias a su semen y a sus manos. Su boca pronunció el nombre de cada cosa, y de ella salieron Shu y Tefnut.

La visión de sus ojos, y el oír de sus oídos, y el oler de su nariz, son los que informan a su corazón, que es de donde surge todo su conocimiento. Su lengua anuncia lo que su corazón piensa. Y así nacieron todas las cosas, y su enéada fue completada.

Y ocurrió que su corazón y su palabra predominaron sobre todos los miembros de su cuerpo, y por eso Ptah está en el cuerpo y en la boca de todos los dioses, de todos los animales, de todos los reptiles, de todos los seres vivientes, pensando y decretando todo lo que él desea.

Cada palabra divina se realizó conformemente a lo que pensó el corazón  de Ptah, y a lo que la palabra ordenó. Así fueron creados los espíritus machos y promovidos los espíritus hembras, autores de todo alimento y toda subsistencia, por medio de la palabra de aquel que hace lo que le place, y aquel que hace lo que se aborrece. Así se dio vida al pacífico, y muerte al turbulento.

Así fueron creadas cada labor y cada oficio: la actividad de las manos, el movimiento de las piernas, la función de cada miembro. Todo de acuerdo con el designio que pensó el corazón de Ptah, y que expresó su palabra. Todo enteramente.

Por eso decimos que Ptah que es Aquel "que hizo todo y que hizo existir a los dioses". Él hizo el Ta-Tenen, la "tierra que surge" del abismo primordial; él fue quien dio nacimiento a los dioses, y aquel de quien todas las cosas han surgido: los alimentos, las subsistencias, las ofrendas divinas y todas las cosas buenas. Por ello se reconoce y comprende que su poder es más grande que el de los otros dioses.

Y así Ptah se sintió satisfecho, una vez que hubo hecho todas las cosas y dijo todas las palabras divinas.

Él dio nacimiento a los dioses, él fundó las ciudades, él estableció los nomos, él fundó sus santuarios, él instaló a los dioses en sus santuarios, él organizó sus ofrendas.

Él fabricó los cuerpos según sus deseos, elaborados con toda especie de plantas, toda clase de piedras, toda clase de barro, y con todas las materias que crecen en el Ta-Tenem. Y permitió a los dioses que penetraran en sus cuerpos.

Todos los dioses se unen a él, lo mismo que sus ka, satisfechos y reunidos en el señor del doble país[4].

[1] Ptah, el Dios de los egipcios.
[2] sus ka: sus espíritus divinos, pues ka = espíritu divino, en la concepción egipcia que considera a todas las cosas formadas por cuerpo (c), alma (ba) y espíritu divino (ka).
[3] la enéada: los 9 dioses o emanaciones divinas de Dios, según la traducción que hicieron los griegos de la palabra egipcia pesediet. No obstante, estrictamente habría que hablar de ogdóada u 8 dioses, pues 8 fueron los que salieron, por emanación, del primigenio Ptah. De hecho, el 9º de los dioses (Ra) no salió de Ptah, sino que por sí mismo emergió de la Ta-Tenem (o montaña primordial).
[4] el faraón, protegido por los dioses, y por eso llamado "hijo de los dioses".

PIEDRA DE SHABAKO
Relato II de la Creación

El Horus viviente, que hace propicias las dos tierras, el Horus de Oro, el rey del Alto y Bajo Egipto, Neferkara, hijo de Ra, Shabako, bienamado de Ptah al sur de su muro, que vive como Ra por siempre.

Su majestad copió este texto nuevamente en la casa de su padre Ptah, el que está en el sur de su muro. Lo encontró su majestad como una obra realizada por sus ancestros, que había sido destruida por los gusanos, de manera que no podía ser reconocido en su totalidad. Por eso su majestad lo copió de nuevo, para que esté en mejor estado de lo que estaba anteriormente. Lo hizo para que su nombre perdure y para que se haga su monumento en la casa de su Padre Ptah al sur de su muro, por toda la eternidad[1] como obra hecha por el hijo de Ra, Shabako, para su padre Ptah-Ta-tenen[2], para que pueda ser dotado de vida por siempre.

*  *  *

El rey del Alto y Bajo Egipto es Ptah, que es llamado por el gran nombre de Ta-tenen al sur de su muro, señor de la eternidad, el unificador del Alto y Bajo Egipto. Él es el unificador que se alzó como rey del Alto Egipto y se elevó como rey del Bajo Egipto, el autocreado y quien creó a los 9 dioses[3].

Geb, señor de los dioses, ordenó que los 9 dioses se reunieran con él[4]. Juzgó a Horus y Seth y puso fin a su disputa. Hizo a Seth rey del Alto Egipto en la tierra del Alto Egipto, el lugar en el que había nacido. E hizo rey del Bajo Egipto a Horus en la tierra del Bajo Egipto, en el lugar en el que su padre fue ahogado, que fue en la división de la dos tierras. Así Horus permaneció sobre una región y Seth sobre la otra, y mantuvieron la paz sobre las dos tierras en Ayan, que es la frontera de las dos tierras.

Dijo Geb a Seth: "Dirígete al lugar en el que naciste, al Alto Egipto". Y dijo Geb a Horus: "Acude al lugar en el que tu padre fue ahogado, que es el Bajo Egipto"[5]. Estas fueron las palabras de Geb a Horus y Seth: "Os he separado, en el Bajo y Alto Egipto".

Entonces Geb creyó injusto que la parte correspondiente a Horus fuese igual que la de Seth, y por eso pensó darle toda su herencia. Entonces dijo Geb a los 9 dioses: "He nombrado a Horus el primogénito, y el único a la sucesión. Él es el heredero de mi herencia. Y al hijo de mi hijo, el chacal del Ato Egipto, él será el abridor de caminos".

Entonces Horus se quedó en la región como el unificador de esta tierra, proclamado con el gran nombre de Ta-tenen, que está al sur de su muro, señor de la eternidad. Y así surgieron las dos grandes magas[6] sobre su cabeza. Él es Horus, que se erigió como rey del Alto y Bajo Egipto, quien unió las dos tierras en el nomo del muro[7], en el lugar en el que se unen las dos tierras.

Se colocaron el junco y el papiro en la doble puerta de la casa de Ptah, y Horus y Seth se pacificaron y unieron.  Y fraternizaron de forma que pudieron cesar sus disputas en cualquier lugar en el que pudieran existir. La casa de Ptah fue la balanza de las dos tierras, en la que el Alto y Bajo Egipto se pesaron.

El sepelio de Osiris está en la tierra, en la casa de Sokar, porque Osiris fue ahogado en sus aguas. Entonces Horus habló a Isis y Neftis: "Deprisa, cogedle". E Isis y Neftis le buscaron, le vieron y atendieron, diciendo a Osiris: "Venimos, te tomamos". Osiris accedió a los portales oscuros, a la gloria de los señores de la eternidad. Pero cuando Isis y Neftis lo reanimaron heredó la fortaleza real, al norte de la región a la que él había venido, y su hijo Horus se erigió como rey del Alto y Bajo Egipto.

Luego se construyó la fortaleza real[8], bajo el mandato de Geb, que para ello habló con Thot y a Isis. Por su parte, Isis habló a Horus y Seth: "Venid y mantened la paz, y la vida será placentera para vosotros, y se secarán vuestras lágrimas".

*  *  *

Los dioses[9] vinieron a la existencia de Ptah[10].

Ptah es el que está sobre el gran trono, y fue quien creó a los dioses. Creó a Ptah-Nun[11], el padre que engendró a Atum[12], y creó a Ptah-Naunet, la madre que dio a luz a Atum. Ptah es el Grande, y el corazón y la lengua de la enéada. De él nacieron los dioses.

Ptah es el Grande que infundió la vida a todos los dioses y a sus kas por medio del corazón (en el que Horus tomó forma) y por medio de la lengua (en la que Thot tomó forma), como manifestaciones de Ptah.

En Ptah, su corazón y su lengua obtuvieron la supremacía sobre todos los miembros de su cuerpo, de acuerdo a la doctrina que él está en cada uno de los cuerpos y cada una de las bocas de cada uno de los dioses, de todos los hombres, de todo el ganado, de todos los seres que se arrastran y de todo lo que vive, pensando lo que él desea y decretando todo aquello que anhela. Toda la enéada está en Ptah.

Atum vino a la existencia por medio de su semen y sus dedos, y Shu y Tefnut surgieron de sus dientes y sus labios.

La vista de sus ojos, la audición de sus oídos, la respiración de su nariz, informan al corazón de Ptah, que es el que hace que todo conocimiento pueda manifestarse, y concibe a la lengua la que ha de pronunciar. Así fue como nacieron todos los dioses y su enéada se completó, porque cada palabra de Dios vino a la existencia por medio de lo que su corazón pensaba, y su palabra ordenaba.

Así fue creado cada uno de los ka, y establecidos todos los hemsut[13]. Así se procuraron todos los alimentos y provisiones, por medio de su palabra. Así también se hace justicia a quien hace lo que es deseado, y se castiga a quien hace lo no deseado. Así se da la vida a quien tiene paz, y la muerte a aquel que tiene pecado. De esta forma se crearon todos los trabajos y todas las artes, la acción de las manos y el andar de las piernas, así como el movimiento de cada uno de los miembros, de acuerdo a la orden concebida por el corazón de Ptah, y manifestada por medio de su palabra, que produjo todas las cosas.

De esta manera se dice de Ptah que fue "el que creó todo y dio la existencia a los dioses", y así se reconoció y comprendió que su poder es superior al de cualquier otro dios. En verdad, él es Ta-tenen[14], quien hizo nacer a los dioses y del que surgió toda existencia: la comida, las provisiones, las ofrendas divinas, y todas las cosas buenas y hermosas. Ptah se sintió satisfecho después de crear todas estas existencias, por medio sus divinas palabras[15].

Ptah hizo nacer a los dioses de las ciudades, fundó las ciudades y los nomos, colocó a los dioses en sus santuarios, estableció sus ofrendas, dio origen a sus capillas, y creó sus cuerpos de la forma en que sus corazones lo desearon. Y así fue como los dioses entraron en los cuerpos de esas cosas, de todas las maderas, de todas las piedras y de todo el barro. En todas las cosas que crecen sobre el barro residen sus manifestaciones.

De esta manera todos los dioses fueron reunidos en Ptah, y también sus kas, satisfechos y unidos al señor de las dos tierras.

El granero de Ta-tenen[16] es el gran trono[17] que alegra el corazón de los dioses que están en la casa de Ptah[18], y el corazón de la señora de todo lo vivo, por medio de la que se provee el sustento de las dos tierras.

Osiris estaba flotando en sus aguas. Isis y Neftis lo advirtieron, lo encontraron y se consternaron, pero Horus ordenó[19] a Isis y Neftis que tomaran el cuerpo de Osiris y evitasen que se hundiese[20]. Ellas volvieron sus cabezas a tiempo y le llevaron a la orilla. Y así fue como Osiris accedió a las puertas ocultas, en la gloria de los señores de la eternidad, en los pasos de Aquel que brilla en el horizonte sobre los caminos de Ra, en el gran trono. Él (Osiris) accedió a la gran casa y se reunió con los dioses de Ta-tenen de Ptah, el señor de los años.

Así, Osiris entró en la tierra y en la fortaleza real, al norte de la tierra a la que había llegado. Su hijo Horus se alzó como rey del Alto Egipto y como rey del Bajo Egipto, en el abrazo de su padre Osiris y de los dioses que se encontraban delante y detrás de él[21].

*  *  *

[1] en egipcio existían 2 términos que solemos traducir por eternidad: 1º diet, o eternidad lineal (entendida como infinito) y 2º neheh, o eternidad cíclica (entendida como constante renovación).

[2] uno de los epítetos de Ptah, Ta-tenen, proviene de un dios primitivo que Menfis supo asimilar con Ptah. Su nombre significaba "el suelo que se levanta", y aludía a la encarnación de la colina primordial (sobre la que Ptah creó todas las cosas de la tierra). Un Ta-tenen que bien pudiera originar, tiempo más tarde, la leyenda de Ra (como dios no emanado de Ptah, sino surgido por sí mismo de la colina primordial).

[3] a la eneáda (o 9 dioses), pues a pesar de que Ptah es Dios Supremo, no se descartan en este Poema otras diferentes cosmogonías (como la heliopolitana, en que los 9 dioses aparecen como una creación más (y no como emanación) del propio Ptah).

[4] las columnas siguientes tratan de las disputas y posterior pacificación de Horus y Seth, mientras el orden universal todavía no había sido establecido. Unas disputas y pacificación en que Ptah actúa de juez y árbitro. No obstante, en el texto se observa cómo inicialmente Ptah divide el país entre Horus y Seth, para más tarde (arrepentido) darle el dominio de las dos tierras a Horus, como primogenito y heredero suyo. Momento en el que las dos magas (las dos coronas) se sitúan sobre la cabeza de Horus. Así, Horus adopta el papel de unificador del Alto y Bajo Egipto. Y cada uno de los reyes egipcios, en el momento de su coronación, asumen el título del "Horus viviente". En el texto, Ptah se dirige a los 9 dioses, haciéndoles saber su decisión.

[5] mientras que Seth acude a su lugar de nacimiento, Horus lo hace al lugar en el que flotaba su padre Osiris. Parece que el derecho a reinar de Seth viene dado por su origen, mientras que el de Horus le es concedido por los méritos de Osiris. El término empleado aquí, el "hundimiento en las aguas", es más apropiado que el hecho de "morir ahogado".

[6] epíteto de las 2 coronas egipcias, la del Alto Egipto y la del Bajo Egipto.

[7] epíteto de Menfis.

[8] sección que relata la construcción de la Fortaleza Real de Menfis, como sede del gobierno.

[9] relato propio de la teología menfita: Ptah es el Dios Supremo, y todos los dioses no son sino manifestaciones suyas.

[10] bajo la manifestación de Ptah.

[11] lit. "aguas primigenias" (océano primigenio), en las que se encontraba la semilla de la vida.

[12] nueva integración en la cosmogonía menfita de las ideas de Heliópolis. Atum aparece aquí como dios creado por Ptah, frente a la idea de autocreado de los textos heliopolitanos.

[13] equivalentes femeninos de los ka. Pues todo ser vivo fue dotado por Ptah de cuerpo (c), alma (ba) y espíritu (ka).

[14] referencia a la colina primordial.

[15] referencia a la Maat (lit. Justicia), palabra con la que Ptah dio origen a todas las cosas.

[16] sección que establece Menfis como ciudad real y capital. En ella se relata que el cuerpo de Osiris llegó a la ciudad y entró en la fortaleza real (es decir, fue enterrado en Menfis).

[17] Menfis.

[18] el Templo de Ptah.

[19] en el Mito de Osiris, y por propia voluntad, Isis busca y recoge el cadáver de su marido Osiris. No obstante, aquí, al igual que en los Textos de las Pirámides, es Horus (su hijo) quien ordena la acción de Isis (la cual busca la colaboración de su hermana Neftis).

[20] lit. ahogase, aunque también se pueden emplear los términos flotar y hundir. En cualquier caso, la referencia al hundimiento (o ahogamiento) de Osiris en el Nilo nos sugiere una clara analogía con el poder fertilizador de las aguas del Nilo.

[21] lit. "antes y después que él", expresión que sugiere una aceptación final de Horus como gobernante legítimo de Egipto, con el consenso de su padre Osiris y todos los dioses.