Paso 6 de Santidad

LA ORACIÓN DE PETICIÓN

Escuela Jóvenes Cristianos
Molina de Segura, 28 junio 2021

escritura

1. Pedid y se os dará; buscad y hallaréis; llamad y se os abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. ¿O hay acaso alguno entre vosotros que al hijo que le pide pan le da una piedra; o si le pide un pescado le da una culebra? Si, pues, vosotros, siendo malos, sabéis dar cosas buenas a vuestros hijos, ¡cuánto más vuestro Padre que está en el cielo dará cosas buenas a los que se las pidan! (Mt 7, 7-11).
2. Todo lo que pidáis en mi nombre, yo lo haré (Jn 14, 13).
3. Pedís y no recibís porque pedís mal, para dar satisfacción a vuestras pasiones (Sant 4, 3).
4. Si permanecéis en mí y mis palabras permanecen en vosotros, pedid lo que queráis y lo conseguiréis (Jn 15, 7).
5. Hágase en vosotros según vuestra fe (Mt 9, 29).
6. No sabemos lo que nos conviene pedir (Rom 8, 26).
7. Si le pedimos algo, según su voluntad, nos escucha (1Jn 5, 14).
8. Si sabemos que nos escucha en lo que le pedimos, sabemos que tenemos conseguido lo que hayamos pedido (1Jn 5, 15).
9. Dios no escucha a los pecadores; pero si uno es religioso y cumple su voluntad, a ése le escucha (Jn 9, 31).
10. La oración del justo tiene mucho poder (Sant 5, 16).
11. Cuanto pidamos lo recibimos de él, porque guardamos sus mandamientos y hacemos lo que le agrada (1Jn 3, 22).
12. Encomienda tus obras a Dios y tus planes se llevarán a cabo (Prov 16, 3).
13. Vuestros pecados le han hecho volver su rostro de vosotros para no escucharos (Is 59, 2).
14. Me invocaréis y vendréis a rogarme, y Yo os escucharé. Me buscaréis y me encontraréis cuando me solicitéis de todo corazón (Jer 29, 12-13).
15. Todo cuanto pidáis en la oración, creed que ya lo habéis recibido y lo obtendréis. Cuando os pongáis de pie para orar, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que vuestro Padre que está en el cielo os perdone (Mc 11, 24-25).
16. Invócame, y Yo te oiré benigno (Jer 33, 3).
17. Pedid y recibiréis para que vuestro gozo sea colmado (Jn 16, 24).
18. Os aseguro que si dos de vosotros se ponen de acuerdo en la tierra para pedir lo que fuere, lo conseguirán de mi Padre que está en el cielo. Donde se reúnen dos o tres en mi nombre, estoy Yo en medio de ellos (Mt 18, 19-20).

magisterio

19. Pidamos la protección de la Virgen (JUAN PABLO II, 6-1-1990).
20. Os deseo que encontréis siempre aliento y apoyo en la comunión de los santos (JUAN PABLO II, 18-3-1990).
21. El medio principal para construir la paz es la oración intensa, humilde y confiada (JUAN PABLO II, 4-4-1987).
22. Son muchos los que acuden al Señor para pedirle que los cure de sus enfermedades, pero acaso son pocos los que le preguntan como el letrado del evangelio: "Maestro, ¿qué tengo que hacer para heredar la vida eterna?" (JUAN PABLO II, 11-5-1988).
23. No debía de pasar nunca un día sin que todos los fieles dirigieran un saludo, un pensamiento a la Virgen, para conseguir así un rayo de luz y de sol sobre nuestra vida (PABLO VI).
24. Hacer la experiencia de la oración es acoger la gracia que nos cambia (JUAN PABLO II, 1-1-1984).
25. Nuestras oraciones, sufrimientos y gozos afectan a los demás de un modo que sólo Dios conoce plenamente (JUAN PABLO II, 27-5-1990).
26. Pidamos al Padre humildemente que el Espíritu de la Verdad esté siempre presente en nuestros corazones para poder amar cada vez más a Cristo (JUAN PABLO II, 28-3-1990).
27. No dejen de encomendar a Dios en la oración a sus sacerdotes (VATICANO II, LG, 37).
28. La Iglesia no cesa de pedir a la Madre de Dios que se mantenga especialmente cercana (JUAN PABLO II, 1-1-1990).

tradición

29. Para pedir bien hemos de rezar con humildad, con confianza y con perseverancia (San ALFONSO Mª LIGORIO).
30. Es imposible que las oraciones de muchos no alcancen lo que piden (San AMBROSIO).
31. No es malo que pidamos con insistencia; pero se hace totalmente indigno de que sea atendida su petición, aquél que es desagradecido (San BERNARDO).
32. Dadme vuestra gracia, Señor mío, para que piense en Dios con alegría y pida tiernamente su ayuda (Santo TOMÁS MORO).
33. Dios no escucha la oración de los orgullosos (San ALFONSO Mª LIGORIO).
34. La oración de Moisés era tal, que ataba a Dios las manos (Beato FRANCISCO PALAU).
35. ¿Cómo exiges que Dios te oiga si tú no le oyes a él? (San CIPRIANO).
36. Quien quiera que Dios le escuche, escuche primero a Dios (San AGUSTÍN).
37. Algunas cosas no son negadas, sino demoradas (San AGUSTÍN).
38. Dios no escucha la oración de quien ruega sin atención (San GREGORIO NACIANZENO).
39. La inoportunidad es muy oportuna a los ojos del Señor (San JERÓNIMO).
40. Dios niega misericordiosamente a algunos lo que a otros concede como castigo (San AGUSTÍN).
41. Quien reza y deja a la vez divagar el espíritu por cosas extrañas, no sólo no alcanzará gracias sino que más bien provocará la ira de Dios (San BASILIO).
42. Es posible que sea tal la fe de un alma de oración, que ella sola desarme la justicia de Dios y abra los tesoros de sus inefables misericordias (Beato FRANCISCO PALAU).
43. Que haya una sola oración en común, una sola súplica (San IGNACIO DE ANTIOQUÍA).
44. Forzad la bondad de Dios hasta que os socorra (San ANTONIO ABAD).
45. Todas las gracias nos llegan mediante María (San MAXIMILIANO KOLBE).
46. Si pedimos cosas perjudiciales al alma, el Señor ni las escucha, ni puede escucharlas (San ALFONSO Mª LIGORIO).
47. Si la oración no es pura y va acompañada de plena certidumbre de la fe, Dios no la recibirá (San MACARIO).
48. Escucha a Dios en sus mandamientos para que él te escuche en tus oraciones (San JUAN CRISÓSTOMO).
49. Sé mendigo de Dios (San AGUSTÍN).
50. Pido al Señor que las oraciones que se hacen por mí no sirvan para aliviar mis sufrimientos, sino todas ellas para obtener la salvación de los pecadores (Santa TERESA DE LISIEUX).
51. Ineficaz es la petición si es estéril la oración (San CIPRIANO).
52. La oración de quien se humilla penetra en el cielo y no retrocede sin que Dios la escuche y atienda (San ALFONSO Mª LIGORIO).
53. Jesús es en el cielo, más que nunca, Hijo de María, y María, Madre de Jesús. Como tal, María tiene autoridad sobre él, y él le está sometido porque así lo quiere. Esto significa que María obtiene de Jesús todo cuanto quiere, lo comunica a quien quiere y lo hace cuando quiere (San LUIS Mª GRIGNION).
54. Cuántas veces he pensado que quizás debo todas las gracias de que me veo colmada a las oraciones de algún pobrecito que no conoceré sino en el cielo (Santa TERESA DE LISIEUX).
55. Las oraciones de María son siempre atendidas (San ALFONSO Mª LIGORIO).
56. El mejor de nuestros actos, la más alta de nuestras obras, es la perseverancia en la oración. Por ella podemos adquirir cada día todas las virtudes, pidiéndolas a Dios (San MACARIO).
57. Las oraciones de los humildes son siempre atendidas por Dios (San ALFONSO Mª LIGORIO).
58. Cuando Dios es amado, con grande facilidad acude a las peticiones de su amante (San JUAN DE LA CRUZ).
59. Si pedimos algo contrario a nuestra salvación, no pedimos en nombre del Salvador. Dios, usando de su misericordia, se niega a oír al que ha de usar mal lo que desea recibir (San AGUSTÍN).
60. Dios difiere el don para aumentar nuestra vigilancia en la oración (San JUAN CRISÓSTOMO).
61. Tres cosas se requieren para que la oración sea cual conviene, para que se dirija siempre bien y consiga efecto; el que ora no debe nunca olvidar: qué es lo que pide, quién es Aquél a quien pide, y quién es el que pide (San BERNARDO).
62. Guarda siempre el Señor la norma de no adelantarse a los milagros, sino esperar a que se los pidan (San JUAN CRISÓSTOMO).
63. Si quieres que tu oración vuele hacia Dios, ponle dos alas: el ayuno y la limosna (San EULOGIO DE CÓRDOBA).
64. Las almas se ganan con las rodillas (San CARLOS BORROMEO).
65. No hay oración perfecta sin invocación interior. El Señor satisface al alma que ora sin distracción (San MARCO ERMITAÑO).
66. Dios oye más la oración del corazón que la de los labios (San LUIS Mª GRIGNION).
67. Si se persevera, no se niega Dios a nadie (Santa TERESA DE JESÚS).
68. Grande mal es tener más ojo a los bienes de Dios que al mismo Dios (San JUAN DE LA CRUZ).
69. En los comienzos en la oración, andar con alegría y libertad... que siempre, aun por humildad, es bueno conocer nuestra miserable naturaleza (Santa TERESA DE JESÚS).
70. La oración fiel, humilde y fervorosa, penetra el cielo (San BERNARDO).
71. Que todos busquen el remedio y la salvación eterna por intercesión de la Reina del cielo, María Santísima (Beata MARÍA JESÚS AGREDA).

reflexión

Invoca al Espíritu Santo
Lee en silencio y medita todas las citas
Frase elegida número:    ¿Por qué?
¿Cómo es mi vida de oración?
¿Qué cosas pido a Dios en mis oraciones? ¿Cuándo las suelo pedir? ¿Soy perseverante, o me canso enseguida?
¿He comprobado el efecto del apoyo de una comunidad al pedir a Dios?
Lee y medita la 45 y 53. ¿Qué me dicen en verdad?
¿Por qué no escucha Dios algunas de mis oraciones?
El compromiso concreto que hoy hago es:
Finalizar con una acción de gracias, y peticiones al Señor y a María