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ARÍSTIDES DE ATENAS

resumido por

ESCUELA DE JÓVENES CRISTIANOS, FILIAL DE MERCABÁ

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Arístides de Atenas (70-140) fue apologista griego y el escritor más antiguo de la Iglesia cuya Apología se conserva, como carta dirigida al emperador Adriano (ca. 124). No obstante, los testimonios sobre su vida y obra son escasos.

Vida. Según Eusebio de Cesarea Arístides fue "nuestro filósofo ateniense", así como "fiel seguidor de nuestra religión" (Historia Eclesiástica, IV, 3), que hizo frente al emperador Adriano cuando éste visitó Atenas y se inició en los misterios eleusinos, el año 2.141 del Chronikon (ca. 124 d.C). Por su parte, San Jerónimo añade que Arístides siguió conservando el palio de filósofo tras su conversión al cristianismo (Varones Ilustres, XX; Epístolas, LXX, 4).

A este testimonio sucedió un enorme silencio sobre Arístides hasta 1878, en que los mequitaristas de San Lázaro de Venecia publican un manuscrito del s. X, conteniendo un fragmento en armenio titulado "Al emperador Adriano César de parte del filósofo ateniense Arístidos". En 1891 Harris descubre en el Monasterio Santa Catalina del Sinaí una traducción siria de dicha apología, y Robinson muestra que el texto de esta apología se encuentra publicado en griego entre las obras de San Juan Damasceno (PG, XCVI, 859-1240), formando parte del Barlaam y Josafat.

Obras. Eusebio de Cesarea afirma que "Arístides dejó una apología en favor de nuestra fe, dirigida a Adriano", así como que "muchos conservan esta obra en nuestros días" (Historia Eclesiástica, IV, 3). Con todo, ignoramos si la Apología a la que se refiere Eusebio alude a su versión siriaca, armenia o griega (coincidentes en líneas esenciales, pero con diferencias sensibles en los detalles), o más bien a su edición original.

Aunque la mayoría de los autores opinan que la Apología de Arístides fue escrita el 124, durante la estancia de Adriano en Atenas (según testimonio de Eusebio), Geffcken la considera dirigida a Antonio Pío el año 140, apoyado en la 2ª inscripción del Códice Siriaco, 16 (s. VI-VII) del Monasterio de Santa Catalina, pero sin tener en cuenta que dicha inscripción pudo muy bien ser alterada.

La Apología se compone de 17 artículos, que pueden dividirse en: introducción (art. l), examen de las diversas religiones (art. II-XVI) y conclusión (art. XVII). En líneas generales, la obra no se detiene a rechazar las calumnias contra los cristianos, ni se aventura por los caminos de los argumentos jurídicos. Simplemente, confiesa su fe con sencilla y ardiente convicción.

No se puede atribuir a Arístides, por último, la Carta a los Filósofos de la que habla Martin (Analecta Sacra Spicilegio Solesmensi Parata, IV, París 1883), por el simple hecho de designar a la Virgen como la "virgen hebrea" (de igual manera que Arístides la designa en su Apología) o depender algunas líneas maestras de la Apología. De hecho, Arístides fue ajeno a las luchas contra el nestorianismo, de las que habla dicha Carta.

Doctrina. Arístides comienza su exposición doctrinal demostrando la existencia de un único Dios, personal y providente, fundándose en el movimiento y armonía del universo. A continuación señala los principales atributos que convienen a ese Dios, y recalca que Dios no necesita de sacrificios ni de libaciones humanas.

Tras esta confesión de monoteísmo, inicia el examen de las diversas religiones, siguiendo la división del género humano en 4 razas o pueblos (bárbaros, griegos, judíos y cristianos) y sus diversas religiones (politeísmo, monoteísmo y monoteísmo trinitario), en estrecha dependencia del kerygma Petri, para terminar con la simplificación de que hay buscadores de la verdad o indiferentes satisfechos.

Tras criticar las religiones no cristianas, afirma Arístides que sólo los cristianos, que tienen su origen en Jesucristo, el Señor, Hijo de Dios y nacido de una virgen hebrea (en el texto griego "una virgen santa"), han encontrado la verdad. Ellos reconocen al verdadero Dios (Padre, Hijo y Espíritu Santo), guardan en su corazón los mandamientos de Cristo y esperan "la resurrección de los muertos y la vida del siglo futuro".

Especialmente, Arístides subraya la autenticidad del cristianismo, basándose en la renovación de costumbres que lleva consigo, y en un estilo de vida que parece depender de los primeros capítulos de la Didajé.

Concluye expresando una doble esperanza: que callen las lenguas de los calumniosos, y que antes de la vuelta de Cristo Juez se conviertan aquellos que todavía no conocen al verdadero Dios. En suma, Arístides ordena toda su doctrina en torno a la noción de Dios y de su enviado Jesucristo.

Ver aquí su Apología a Adriano ().
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cf. MATEO, L.F; "Arístides Ateniense", en Gran Enciclopedia, ed. Rialp, Madrid 1991.

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Molina de Segura, 8 de Abril de 2024