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Bulímica y Deprimida
Querétaro,
6 febrero 2023 Hace tiempo me escribía una chica que me decía: "Soy una chilena de 21 años, y acabo de leer uno de los artículos escritos en internet por usted, señorita Yusi. A mis 21 años padezco de bulimia. Empecé con ella hace ya un año, y no he podido salir de ella y dudo muchísimo que lo haga. En estos momentos estudio ingeniería en informática, y apunto a titularme a fin de año, si Dios quiere. Ya he pasado por dos intentos de suicidio que no han dado resultado. El primero fue bebiendo insecticida en un vaso grande hasta el tope, y el segundo cortándome las venas de mis muñecas. Ambos no dieron resultado, y obviamente mi familia se enteró. Actualmente estoy en tratamiento psicológico. También me está viendo un nutricionista, aunque estos tratamientos no me ayudan para nada. Se trata tan sólo de ir una vez por semana al psiquiatra, y contarle a grandes rasgos lo que he hecho el fin de semana, o decirle si alguien me ha visto fea. En cuanto a la bulimia, y mi bajísima autoestima, no he visto resultado alguno. Sé que esta enfermedad me puede llevar a la muerte, y aunque ésta no me importa, sí que me interesa no preocupar a la gente a mi alrededor, sobre todo a mi familia. Ellos tratan de ayudarme, y les estoy agradecida por ello. Pero nada varía desde mi último intento de suicidio. Como ve, mi caso es loco y complicado, y la única solución que se ve, cuando se sufre esto, es el suicidio. Me considero una persona con sueños, pero con mucho temor al mañana. Me gustaría entablar conversación con mas gente como yo a través de este correo electrónico, aunque quizás mi mensaje no lo vean o lean jamás". Si hay algo que no vale la pena, querida amiga, es que te quites la vida. Eso no solucionaría absolutamente nada, y le dejarías un dolor inmenso a tus seres queridos. En los años que tengo de experiencia me he encontrado con que la herida más difícil de sanar es la muerte de un hijo, y si esa muerte fue suicidio, te digo que es extraordinariamente difícil recuperarse. No quiero decir que imposible, pero yo no he visto todavía ningún padre o madre que se haya recuperado después del suicidio de un hijo. ¿Tienes idea de la cantidad de dudas y de sentimientos de culpa que surgen después? Tus padres no son perfectos, pero te aman y cuentas con ellos. Dales la oportunidad de ayudarte. Me da la impresión de que no estás manteniendo un contacto real con el psiquiatra. No sé si por falta de empatía o porque su técnica no es adecuada para ti, o porque tú no te has metido en el proceso. Yo tengo casos en los que la persona asiste a mi consultorio porque la llevó su mamá o su pareja, y se pasa las sesiones sin involucrarse verdaderamente en su terapia. Mi consejo es que, ya que estás en ese proceso, te abras completamente y asumas la responsabilidad de tu propio crecimiento. Entiendo que te asuste la vida y el mañana. Bienvenida al género humano, porque la mayoría de los seres humanos nos hemos sentido asustados por la vida y por el mañana. Por supuesto, tu estado emocional empeora las cosas, pero puedes salir de esto. No vale la pena que sufras tanto, y tienes lo que necesitas para salir de este estado: inteligencia, sensibilidad, valor, sueños, amor en el corazón... No puedo darte una receta ni una sucesión de pasos, pero sí puedo asegurarte que hay una mejor vida para ti, y que todavía están por llegar los mejores años de tu vida. ¿No sabes cómo llegaste a mi artículo en internet? Yo creo que Dios lo puso en tu camino, para que te pusieras en contacto conmigo y yo pudiera darte una luz de esperanza. ¿Te das cuenta? No estás sola. Eres hija de Dios, él te ama y te acepta. Como puedes ver, nadie tiene por qué rechazarte a causa de tu condición. Tú puedes vivir una vida plena y ser feliz, y no se necesita tener pareja para lograr esto. La bulimia, creo que ya lo sabes, está íntimamente relacionada con la falta de autoestima, con la necesidad de buscar aprobación, y con la dificultad para pararte sobre tus propios pies. Hay otros aspectos, por supuesto, como el significado de la comida y la relación temprana con la madre. Pero estos son temas para tus terapeutas. Lo que yo puedo decirte desde aquí es que, aunque veas todo tan oscuro y te sientas tan vacía, debes creer que es posible construir un sano amor por ti misma. Y es posible porque ésta es parte de tu vocación como ser humano que eres. Estamos hechos para amar, y esto incluye también el amor a nosotros mismos. La única solución, cuando se sufre, no es el suicidio. De hecho, ésta no es ninguna solución. La solución es resolver lo que puedes resolver, y aceptar lo que no puedes cambiar. Hay una oración que trata precisamente de eso, que dice: "Señor, dame serenidad para aceptar lo que no puedo cambiar, valor para cambiar lo que sí puedo cambiar, y sabiduría para distinguir la diferencia". No es fácil hacerlo, porque tropezamos siempre en el camino. Pero lo importante es estar ahí, creciendo y descubriendo el sentido de la vida, amando y siendo felices. Sé que te resultará difícil creerme en estos momentos. Sin embargo así es, y estoy segura de que lograrás entenderlo pronto. .
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