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Los Casinos, fuera Ya
Querétaro,
7 febrero 2022 Sólo los invidentes morales no ven que un país se hunde a través del resquebrajamiento moral en que se va metiendo. Y hoy en día, esa decadencia moral está a la orden del día, aunque no la quieran ver quienes están interesados en instalar, cada vez más, esos desplumaderos llamados casinos. Nosotros estamos en contra de la instalación de esos antros en nuestra patria de México, exponiendo válidas reflexiones que hasta la fecha nadie ha repudiado, que sepamos. Y hemos demostrado que, si el congreso llegara finalmente a aprobarlos, el grave daño que se haría al país tendría consecuencias irreparables, por mucho que digan que "sólo se instalarán en las zonas turísticas". La instalación de esos casinos lleva a la bancarrota moral, y hace ir a la gente de mal en peor. Por no hablar de los incrementos de corrupción que tendrían lugar. Lamentablemente, en un casino todo es malo y vicioso, y está lleno de aditivos inmorales que se inyectan en las mismas raíces del ser humano. Además, todo ese mal es provocado a propósito, ha sido urdido por la corrupción organizada, y surte a una serie de mafias institucionalizadas, que viven de eso. Pensemos en las máquinas tragaperras, en el alcohol a menores, en los burdeles pornográficos, en la droga y apuestas... A lo que hay que añadir la publicidad que hacen sus medios de comunicación, convertida así en vehículo de corrupción. En todas las partes del mundo donde los casinos están instalados, éstos se convierten en punto de atracción para todos los corruptos, y al que se acerca de forma inocente lo inician en el vicio corrosivo. Se trata de un negocio al servicio del mal, que destruye a las personas humanas y a la sociedad. El desarrollo integral de una sociedad no es auténtico si se descuida el crecimiento ético. Y por supuesto, ésta va a pique si se propicia la decadencia moral de sus ciudadanos. Esto es lo que proporcionan los casinos, y por eso no es válido el argumento de los que invocan que con los casinos "se incrementará el ingreso de divisas". Entre otras cosas, porque la tajada más grande del pastel se la llevará la mafia internacional. Una mafia que es la que está detrás, en medio y delante de esos macro-negocios. Por eso pedimos a las autoridades que no permitan la instalación de esos casinos, que no se manchen las manos en ellos, y que se decidan por inversiones divertidas y honestas, de verdadero servicio social aquí en México. .
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