2 de Marzo

Inés de Bohemia

Angel Amo
Mercabá, 2 marzo 2024

         Nació en Praga en 1211, hija del rey Otakar I de Bohemia y de la reina Constancia (hermana de Andrés I de Hungría). Con 9 años fue prometida en matrimonio al príncipe Enrique de Alemania (hijo del emperador Federico II de Alemania, y futuro Enrique VII de Alemania) y llevada a la corte del duque de Austria, donde vivió hasta que tuvo 14 años, manteniéndose siempre fiel a los deberes de la vida cristiana.

         Rescindido el pacto de matrimonio, por propia decisión de Inés, volvió Inés a Praga, y allí se dedicó a la de oración y obras caritativas, decidiendo consagrar a Dios su virginidad.

         A través de los franciscanos, que iban a Praga como predicadores itinerantes, conoció Inés la vida espiritual que llevaba en Asís la virgen Clara, según el espíritu de un amigo suyo llamado Francisco. Quedó fascinada por ese ideal, y decidió en adelante apoyar la causa de esa nueva espiritualidad.

         Con sus propios bienes fundó en Praga el Hospital de San Francisco (ca. 1232) y el Instituto de los Crucíferos (ca. 1233), para que fuesen los franciscanos quienes lo administrasen. Al mismo tiempo, fundó un monasterio franciscano para las Hermanas Damianitas, donde ella misma ingreso el día de Pentecostés del año 1234. Allí profesó Inés los votos de castidad, pobreza y obediencia, plenamente consciente de su valor eterno, y se dedicó a practicarlos con fervorosa fidelidad durante toda su vida.

         En adelante, la virginidad por el Reino de los cielos será siempre el elemento fundamental de su espiritualidad, y en en ella implicará toda una profunda afectividad. Y el espíritu de pobreza, que ya la había inducido en el pasado a distribuir sus bienes a los pobres, la llevó ahora a renunciar totalmente a cualquier tipo de propiedad, para seguir solamente a Cristo pobre, a través de la Orden de las Hermanas Damianitas.

         El espíritu de obediencia condujo a conformar siempre Inés su voluntad con la de Dios, que descubría en el evangelio del Señor y en la Regla de vida que la Iglesia le había dado. No obstante, trabajó junto a Santa Clara para obtener la aprobación de una Regla nueva y propia, que tras larga espera recibió y profesó con absoluta fidelidad. Constituida en abadesa del monasterio, ejerció esta función durante toda la vida con la mayor humildad, sabiduría y celo, considerándose siempre como "la hermana mayor".

         Amó Inés a la Iglesia, implorando para sus hijos los dones de la perseverancia y la solidaridad. Se hizo colaboradora de los Romanos Pontífices, que para el bien de la Iglesia solicitaban sus oraciones y su mediación ante los reyes de Bohemia (sus familiares). Amó a su patria, a la que benefició con multitud de obras individuales y sociales, solventando conflictos y promoviendo la fidelidad a la religión cristiana. En sus últimos años, soportó inalterable Inés los dolores de la enfermedad, así como algunos asuntos relativos a su familia real y patria.

         Murió Inés en su Monasterio Damianita de Praga el 2 marzo 1282. El culto que se le tributó a su muerte, y a lo largo de los siglos, tuvo el reconocimiento apostólico por decreto de Pío IX, aprobado el 28 noviembre 1874.

 Act: 02/03/24     @santoral mercabá        E D I T O R I A L    M E R C A B A    M U R C I A